Reclama que esperó 12 horas y no le quisieron sacar la bala
Angustiante relato de guardia que el sábado recibió un balazo en un local del sector norte. Dice que no le ayudaron.
El joven Ubaldo Valdebenito Acevedo de 19 años se encuentra pasando unos de los momentos más dolorosos de su vida, y la raíz de su dolor tiene dos motivos, uno: es que por trabajar esforzadamente se ganó de manera injusta una herida que lo tiene con temor y sin poder dormir; y dos: que tras ello, se llevó la decepción de saber que un hombre con sus ingresos y situación no tiene la posibilidad de contar con la atención que el pide.
Fue la noche de sábado para domingo, cuando en su labor de guardia del local "Goodfather" del sector norte de Antofagasta, recibió de manera fortuita un balazo de unos sujetos que estaban en el lugar.
Según su relato, cerca de las 5:30 de la madrugada del domingo, unos tipos lo tomaron en el baño del local y lo llevaron hacia la sala de baile. Luego de eso le llegó un balazo que entró por la parte trasera de su muslo y terminó dejando el proyectil atrapado en la misma pierna. Tras eso lo llevaron de urgencia al Hospital Regional, pero luego de 12 horas de observación, lo dejaron partir sin retirarle la bala.
"Cuando fui a hablar con el doctor y a preguntarle cómo lo dejaban ir, el doctor me respondió: ¡Yo soy el cirujano, soy especialista! el niño se va de alta y no tiene necesidad (de sacar el proyectil)... se va a disolver sola la bala", comenta la madre Ubaldo, Jéssica Acevedo. Finalmente lo llevaron a su hogar y ayer al Consultorio Norte, donde el atendiendo al sangrado con el que estaba y al dolor permanente, le comentaron que era necesario hacer la extracción.
Por ahora reclaman que todo se pudo resolver el domingo en la urgencia, y siguen esperando, sin tener los recursos suficientes para costear la atención.
En el Consultorio Norte le indicaron que la bala debía retirarse del cuerpo por el dolor permanente.