l Huachipato plasmó ayer en la tarde ante la Universidad Católica de Ecuador en el CAP, las distancias que hay entre un equipo que vive un gran momento y otro que está sumido en una profunda crisis deportiva.
Los acereros le pasaron por arriba a un débil rival en la ida de la segunda ronda de la Copa Sudamericana y el 2-0 final se quedó corto frente a lo que se vio en Talcahuano. De todas formas sirve y el equipo de Mario Salas mira de cerca los octavos de final.
Lo definieron rápido los locales y a los 12 minutos ya estaban en ventaja con un tanto de su goleador en el certamen, Andrés Vilches. Pero no se conformaron y con el 1-0 fueron por más con su receta conocida: intensidad y rápidez en el ataque y presión para recuperar la pelota en terreno contrario.
Huachipato mantendría la intesidad tras el descanso y a los 48' llegaría su premio. Andrés Vilches conectó esta vez un centro del ingresado Angelo Sagal y con su doblete comenzaría a sellar el primer capítulo de la llave 2-0.
Luego los acereros se relajaron y estuvieron cerca de pagarlo. El cuadro de Salas volvió a repetir sus innecesarios riesgos en defensa y con poco los ecuatorianos estuvieron cerca de descontar, desnudando falencias que pueden ser letales ante equipos de mayor jerarquía.
Al final Huachipato celebró y ahora viajará hasta el Atahualpa de Quito la próxima semana con una ventaja de dos goles y el arco en cero.
Sao Paulo espera en octavos de final al ganador de la llave. Los nacionales quedaron un paso más cerca. J