Con el objetivo de promover y fomentar el hábito lector en la población, la Coordinación Regional de Bibliotecas Públicas y la Biblioteca Regional de Antofagasta inaugurarán hoy el proyecto un servicio de lectura móvil: "Bibliocletas".
La iniciativa financiada por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) 2% de Cultura y aprobada por el Consejo Regional (Core), consiste en la implementación de un servicio de lectura móvil a través de dos bicicletas especialmente acondicionadas que llevarán material de lectura y actividades de animación socio cultural a espacios públicos y de intervención social.
De acuerdo a lo expresado por la coordinadora regional de Bibliotecas Públicas, Amy Mayne Nicholls, las "Bibliocletas" es un servicio de extensión bibliotecaria que permitirá promocionar la lectura en espacios no convencionales como plazas, parques y playas, apropiación y participación de la comunidad.
La idea es que chicos y grandes disfruten de la lectura durante su tiempo de esparcimiento en los espacios públicos, especialmente durante la temporada estival.
Intervención
De esta manera, los espacios a intervenir son Plaza Colón, Plaza Sotomayor y Plaza Bicentenario, además de la Avenida Brasil y la Playa Trocadero de Antofagasta.
Mientras que los espacios de intervención social a los que llegarán las "Bibliocletas" son el Centro de Intervención Temprana (Cit) y Centro de Régimen Cerrado (CRC) -ex Surgam,- del Servicio Nacional del Menor (Sename), los programas de intervención Nelson Mandela y Pierre Dubois del jardín del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), además del jardín infantil Rayito de Luz y la Biblioteca Popular Mundo de Colores.
Este proyecto comenzó su funcionamiento durante esta semana y el trabajo de animación lectora se extenderá hasta junio próximo, por lo que la invitación está abierta a la comunidad para aprovechar y disfrutar del innovador servicio de lectura móvil. J
l Según la Tercera Encuesta Nacional de Participación y Consumo Cultural, la lectura en Chile está en alza: si en el 2009 un 41,4% decía haber leído un libro en el último año, el 2013 la cifra subió a 47,6%. La cifra tiene sus bemoles: el 29,8% es del segmento socioeconómico más bajo, el E, mientras el 70,3 es del más alto, ABC1. Y el 77,8 tiene educación universitaria.La cifra sitúa a los chilenos como el segundo país más lector de Latinoamérica, tras Argentina con un 55%,
l Lorena Pereira