Tonko Obilinovic
Se dice que la familia no se elige, pero a los amigos sí. La vida nos hizo coincidir con Tonko Obilinovic como concuñados. De no ser así, sin lugar a dudas, lo habría elegido como amigo. Hombre recto, honesto, de una línea, amante de su familia, amigo de sus amigos. Con la titánica ayuda de su esposa Lila, supo sobrellevar la limitación que muy joven le asignó el destino. Seguramente, como hombre, se rebeló contra aquello, pero nunca le escuché maldecir su condición limitante
Admiré su ímpetu para adecuarse con el fin de realizar su carrera docente y, muy especialmente, su gran pasión, el periodismo deportivo, ambas, dignas de reconocimiento. Tuvimos largas conversaciones y creo que a través de ellas logré conocerlo, pues compartimos una concepción de la vida muy parecida. Ya partió a descansar. Tarde o temprano volveremos a charlar, como siempre, como amigos.
Luis Lino
Vacantes
Señor director:
Qué contradictorio que se pretenda crear nuevos ministerios mientras aún hay 5 subsecretarías vacantes.
Nicolás Fernández