Camila Infanta S.
Aunque las proyecciones hablaban de una inflación cercana al 0,3% el primer mes del año, ayer el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que Índice de Precios al Consumidor (IPC) durante enero fue de 0,5% impulsado principalmente por la entrada en vigencia de una parte de la reforma tributaria y el costo de los limones.
Durante los primeros 31 días del año, diez de las 12 divisiones que conforman la canasta del IPC consignaron incidencias positivas y dos presentaron incidencias negativas. Por producto, el limón es el que tuvo un mayor aumento, del 54,8% respecto al mes anterior. La variación se explicó por una menor oferta y una baja productiva.
Por otro lado, la carne de vacuno también tuvo un aumento del 2%, lo mismo que sucedió con los cigarrillos que subieron un 4%.
En el acumulado de doce meses, el IPC acumula un alza del 4,8%.
Timbres y estampillas
Una de las principales variaciones que permitió que el IPC de enero se disparara tiene que ver con el gasto financiero y la entrada en vigencia, por la reforma tributaria, de la modificación del impuesto de timbres y estampillas.
Este cobro se realiza para los créditos hipotecarios (sin DFL2) y de consumo. En enero tuvo un aumento del 11,3% con respecto al mes anterior.
La economista de BCI estudios, Francisca Pérez, explicó a La Estrella que la inflación en los primeros meses del año suele tener una variación positiva por una alta demanda, lo que se espera que se repita en marzo, principalmente por el ingreso a los colegios y universidades. "Lo sucedido en enero no cambia mucho las proyecciones del año, pues se debe principalmente por el ingreso de la reforma tributaria, que sí le pegó a la inflación más fuerte de lo que se espera. El tipo de cambio más estable hará que éstos se estabilice también", dijo la especialista.