Parecía ser una tarde grata compartiendo en familia, pero finalmente terminó con uno de los comensales en el Servicio de Urgencias del Hospital Carlos Cisternas de Calama.

La víctima fue un hombre de 45 años identificado con las iniciales J.C.V.B, quien se encontraba en el inmueble calle Atahualpa en compañía de su pareja.

Compartieron un picadillo en buena compañía, momento en que también aparecieron algunas bebidas alcohólicas. No se descarta su ingesta haya sido la que caldeó los ánimos hasta que la situación finalmente se salió de control. De un momento la imputada, un mujer de 22 años fue hasta el área de la cocina, lugar en que se encontró con su cuñado, la víctima.

Por causas que no son aún de todos claras comenzaron una discusión. Diferencias de opinión sin llegar a acuerdo hizo que el intercambio de palabras fuera subiendo de tono.

Según las informaciones preliminares fue la mujer quien primero perdió el control de la situación.

De forma sorpresiva decidió tomar un típico cuchillo carnicero con el que agredió a la pareja de su hermana, quien además presenció cada uno de los movimiento de la detenida.

El hombre quedó gravemente herido, por lo que hizo necesaria la presencia de personal de salud y de Carabineros.

Al llegar al lugar encontraron al afectado con evidentes lesiones, por lo que fue derivado de inmediato hasta el hospital.

La Corte de Apelaciones de Antofagasta acogió un recurso de protección presentado contra la Caja de Compensación La Araucana, ordenando poner término a un requerimiento que hizo a la municipalidad de Tocopilla.

Este consistía en descontar mensualmente 33 mil 147 pesos por una deuda de un crédito del año 1998 y en el que Mónica Castro figuraba como codeudora solidaria. En fallo unánime, el tribunal acogió el recurso "por existir una acción arbitraria e ilegal, toda vez que desconoce los derechos que emanan para la recurrente de lo prescrito, exigiendo el cumplimiento de obligaciones naturales, que no dan derecho a iniciar una acción de cobro, por lo que restringió el derecho de propiedad de Mónica Castro Álvarez, al disminuir su patrimonio sin causa alguna".