En el "Panda" tenían a los trabajadores encerrados con llave
Fiscalización evidenció desastre en ese restaurant: gente sin contrato y cocinando con chalas, carne sin refrigerar... Pidieron explicaciones y a chinos se les olvidó hablar en español...
Ignacio Araya Chanqueo
Era una fiscalización de rutina el motivo de la visita de las autoridades del Trabajo en el restaurant "Panda" de Condell con Baquedano, en la tarde de ayer. Pero a medida que ellos iban inspeccionando cómo funcionaba realmente este tenedor libre, fueron tantas las irregularidades encontradas que terminaron llamando a la PDI, a Salud, a Carabineros y a la Gobernación.
Las condiciones del "Panda" eran un desastre. De partida, se encontró a gente cocinando con chalas plásticas; pillaron carne sin refrigeración, el piso mojado y más encima, las instalaciones eléctricas estaban defectuosas. Uno de los trabajadores asiáticos tenía una herida en la pierna, y cuando le preguntaron qué le había pasado, al amigo se le olvidó hablar español y dijo no entender lo que le decían. "Eso no es real, porque son personas que llevan un buen tiempo en Chile", dijo la gobernadora Fabiola Rivero.
Luego de encontrar la sorpresa en la cocina, los fiscalizadores quisieron entrar al resto del edificio, pero en el "Panda" les negaron la entrada y trataron de obstaculizar la revisión. "Acudimos a Carabineros y tuvimos que multar por hostigamiento constante a los fiscalizadores", contó después el director del Trabajo, Rubén Gajardo.
Al entrar a las piezas del segundo piso, encontraron que al menos cuatro de los trabajadores vivían ahí mismo, en pésimas condiciones."Hay elementos clarísimos que acá hay que hacer una denuncia por trata de personas para efectos laborales", explicó la gobernadora Rivero. "Hay situaciones que son intolerables. Los trabajadores no pueden hacer su vida doméstica dentro de las empresas de trabajo". Rubén Gajardo señala que se pudieron empadronar a once trabajadores, pero sólo cinco tenían contrato.
Mientras estaban haciendo la inspección de la improvisada vivienda, las autoridades encontraron varias puertas con llave. Abrían una, pero cerraban otra. Cuando se pidió abrir las puertas, descubrieron que iban sacando a tres trabajadores -dos asiáticos y un chileno- con un montacarga. Todos fueron encontrados afuera, en la vereda. "Los vimos, los entrevistamos y nos dimos cuenta que eran los que estaban dentro", dijo el Director del Trabajo.
"La Estrella" conversó con uno de los trabajadores que esperaba dentro del restaurant mientras las autoridades fiscalizaban. Él -no quiso dar su identidad- contó que le pagaban 12 mil pesos por turno, dependiendo del trabajo que lo mandaran a hacer. De contratos, ni hablar. Intentamos hablar con el encargado, pero nos dijeron que no estaba.
Según el seremi del Trabajo, Pablo Rojas, las condiciones eran tan paupérrimas que casi todo era un riesgo para los trabajadores. "Acá hay riesgo total, había falta de cualquier tipo de elementos de protección personal, riesgo de accidentes de carácter grave", dijo.
Al cierre de esta edición, aún intentaban ingresar a dos puertas que los encargados se negaban a abrir en las oscuras piezas tras el "Panda". El local quedará cerrado hasta que se solucionen los problemas para los trabajadores y otros temas pendientes, porque más encima encontraron medicamentos chinos que podrían ser constitutivos del delito de contrabando.
2014 Ese año se había hecho otra fiscalización al restaurant, que también tenía irregularidades.
11 trabajadores fueron empadronados por la Dirección del Trabajo. Seis no tenían contrato.
ignacio.araya@estrellanorte.cl