Maniobras militares delataron millonario robo
Carabineros de la SIP de la Tercera Comisaría detuvieron en el desierto a un chileno y dos bolivianos, cuyo botín fue avaluado en $5 millones.
Redacción - La Estrella
Las maniobras que realizaba un grupo de militares dejaron al descubierto un millonario robo de cables de cobre, por el cual fueron detenidos un chileno y dos bolivianos en pleno desierto.
Carabineros de la Sección de Investigación Policial (SIP) de la Tercera Comisaría de Antofagasta pusieron a disposición de la Fiscalía Local a Y.M.M.B., J.C.F.S. y W.A.V,, estos dos últimos de nacionalidad boliviana, luego que la institución policial fuera alertada cerca de las 13 horas por personal de Ejército sobre los sospechosos movimientos que el trío llevaba a cabo.
In fraganti
Según la información, a la altura del kilómetro 20 de la Ruta B-475, que lleva a Minera Escondida, los tres imputados estaban en posesión de gran cantidad de cable de cobre y estaban abocados al desprendimiento de la goma que lo recubría. Todo esto, a cerca de 2 kilómetros al oriente de esa vía.
Para conseguir su propósito se valían de una camioneta marca Toyota modelo Hilux doble cabina, de propiedad de uno de los detenidos, cuyo pick up estaba cargado con el parte del botín.
Al interior de dicho vehículo los funcionarios policiales encontraron herramientas como un napoleón y tres armas blancas del tipo corta cartón industrial, el cual es utilizado para desprender el revestimiento de los cables.
Estos resultaron pertenecer a una empresa de ingeniería, lo que fue confirmado por su jefe de seguridad. El material decomisado pesó una tonelada y media.
Avalúo llega a los $5 millones
La tonelada y media de cable de cobre recuperada por Carabineros fue devuelta a la firma afectada y su avalúo alcanzó los 5 millones de pesos. Así lo confirmó el subcomisario de los Servicios de la Tercera Comisaría, capitán Pablo Riveros, quien indicó que los tres detenidos tienen antecedentes por delitos contra las personas y la propiedad.
El modus operandi es investigado, pero el robo fue confirmado gracias al número de serie que tenía el revestimiento plástico.