Ignacio Araya, Javiera Gallardo y Catalina Cortés
Cubriendo todo su cuerpo con un mantel lleno de banderas chilenas, Luis Marín (61) tenía ayer una enorme responsabilidad. Mientras sostenía un cartel que decía que las AFP eran un "saqueo más para todos los chilenos", don Luis encabezaba la enorme columna de diez mil personas que salieron a las calles del centro a marchar en contra del actual sistema previsional.
"Me quedan cuatro años para jubilar, pero ya estamos haciendo una fábrica de pobres. Yo voy a ser un pobre más de los jubilados, alcanzaré a tener la pensión asistencial no más", cuenta don Luis, que hizo sonar una campana durante todo el trayecto que comenzó en Prat con Matta, pasó por la Plaza Colón y luego regresó al Mercado Central.
Una vez finalizó la marcha en la mañana, Jean Seura, vocero en Antofagasta de la coordinadora "No + AFP", dijo estar conforme con la alta convocatoria del movimiento social. "Es una muestra de unidad, de la fuerza de los trabajadores. El paro es una medida concreta, no un simbolismo".
Consultado por el carácter pacífico de la marcha -tomando en cuenta las barricadas y la violencia que se vio en otras ciudades- Seura señaló que el llamado fue específico. "Nosotros teníamos una tarea y la gente se convocó. Hace tres años que estamos trabajando en esto". Por la tarde, en el centro se realizó otro acto para manifestarse en contra del sistema previsional, finalizando la jornada con un caceroleo en distintos puntos de la ciudad.
Cuando ya la jornada estaba finalizando, en medio de los gritos y los aplausos a quienes hacían de oradores en la marcha, don Luis Marín decía que la gente estaba despertando recién ahora, "cuando está todo cocinado".
-Oiga, y con ese traje y este sol. ¿No tiene calor?
-Cualquier sacrificio vale la pena si hay un cambio pa' los viejos.