Cartas
¿Y los relevos?
Estimado director:
Hoy nuestra selección nos brinda alegrías por su forma de jugar, su entrega, el levantar copas de campeones, el respeto que se ha ganado a nivel mundial. Todo es exitoso. Es de esperar que nuestra dirigencia deportiva, el cuerpo técnico en pleno y afines, no se queden obnubilados con el exitoso presente. Al igual que les ocurrió a la gente del tenis, urge trabajar desde ya para buscar los relevos de los Sánchez, Vidal, Medel y tantos otros. Sería muy penoso que esta "generación dorada" solo sea un "veranito de San Juan" y que las generaciones por venir, tengan que volver a esperar 100 años para volver a gritar campeones... ¡Y no es chiste!
Luis Enrique Soler Milla
Delincuencia
Señor director:
Ninguno de los candidatos a las primarias ha leído las estadísticas o entendido cuál es para los ciudadanos ricos y pobres, el principal y prioritario problema a solucionar. No son los trenes de alta velocidad, los miles de empleos, viviendas para todos, jubilaciones justas, crecimiento, entre otras medidas, que de poco y nada sirven. Sí lo es la delincuencia.
Con seguridad todos los que tienen derecho a votar en estas primarias, hubieran deseado escuchar medidas inmediatas, concretas, realizables y de efecto futuro, que impedirían que los delincuentes reciban penas de cárcel irrisorias . Que no por el solo hecho de ser los delincuentes menores de edad, queden libres, burlándose de sus víctimas, las policías y de la justicia, sino que para ellos se construyan reformatorios donde deban permanecer hasta que no se tenga científicamente claro que han sido corregidos. Que la justicia garantista y los derechos humanos de los delincuentes no estén por sobre los de las víctimas.
Sepan los futuros candidatos presidenciales y al parlamento, que lo primero y que más claman los chilenos, es tener la certeza de que sus casas no serán asaltadas, que podrán transitar sin miedo por las calles, que sus autos no serán robados, que las mafias no se apoderarán de sus poblaciones, que sus hogar no sean verdaderas cárceles con barrotes, y que sus vidas y la de sus familias no estén en peligro.
No quieren escuchar falsas promesas o frases como que "terminaré con la puerta giratoria o se les acabará la fiesta a los delincuentes", sin que éstas no estén respaldadas con acciones preventivas eficaces. ¡Quieren soluciones creíbles ya!
Jaime Manuel Ojeda Torrent