Acabó distinción entre obrero y empleado en protección social
Ambos tienen derecho a la misma atención por accidentes laborales y enfermedades profesionales.
Lorena Pereira Molina - La Estrella de Antofagasta
Las diferencias entre obreros y empleados se terminaron, al menos, en materia de protección social, porque ahora todos los trabajadores tendrán los mismos derechos en materia de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales.
Esto significa que en caso de accidentes laborales o de enfermedades profesionales, los trabajadores afiliados al Instituto de Seguridad Laboral (ISL) que hoy reciben la calificación de obreros podrán acceder a una atención en salud especializada en toda red de prestadores. Es decir, a través de prestadores públicos y privados, ya que con la nueva ley todos son considerados trabajadores sin distinción alguna.
La subsecretaria de Previsión Social, Jeannette Jara, en su visita en Antofagasta, explicó que la norma beneficiará a unos 350 mil trabajadores entre manipuladores de alimentos, temporeros y trabajadoras de casa particular.
Agregó que en la región son 28.192 los trabajadores afiliados al ISL y de ellos 12.878, equivalente a un 46% del total, son los que actualmente tienen calidad de obrero y que se verán beneficiados con la nueva ley.
Este anuncio lo hizo ayer en la presentación del Programa Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, un documento que consolida la labor realizada durante el año en los talleres regionales efectuados sobre la materia y cuya versión final está en elaboración.
La subsecretaria destacó esta iniciativa entre las 35 leyes laborales aprobadas durante este gobierno, muchas de ellas relacionadas a seguridad y salud en el trabajo, como las leyes del saco y de salida intempestiva.
Sobre esta última ley, resaltó la regulación del derecho a la resistencia de los trabajadores, que "en esta región es un derecho muy importante porque permitirá a los trabajadores ejercer una salida intempestiva en caso de riesgo grave o inminente".
Así ante un riesgo que se pueda producir en una faena, la primera tarea es del empleador de informar de las eventualidades del riesgo y de tomar las medidas. En caso que ello no ocurriera, "hoy la ley permite al trabajador abandonar la faena para proteger su vida e integridad", concluyó.
3,5 accidentes por cada 100 trabajadores es la tasa de accidentes del trabajo en la Región de Antofagasta.
Tres accidentes por cada 100 trabajadores, o menos, es el desafío país para alcanzar en el 2020.