Los antofagastinos que también se sumaron al histórico Oscar
Frente a la cámara, tras de ella, o incluso desde una sala de grabación, estos antofagastinos pusieron con su cariño y amor al séptimo arte, un granito de arena (o de música) en la película más exitosa del cine nacional.
No se subieron al escenario y no aparecen en los registros fotográficos de las ceremonias oficiales donde el filme chileno "Una Mujer Fantástica" fue cosechando uno y otro, y otro, reconocimiento, pero -a pesar de eso- lo cierto es que la ganadora del Oscar a Mejor Película No Habla Inglesa, sí contó con varios rostros que aportaron un granito de arena al histórico acontecimiento cultural, y, de ellos, algunos nacieron y crecieron en Antofagasta.
Suma otra película
La primera de la lista es la actriz antofagastina Paola Lattus, quien interpreta a una enfermera en el largometraje de Sebastián Lelio. La hija de los reconocidos artistas locales María Teresa Ramos y Ángel Lattus Vodanovic, y que ya ha participado anteriormente en otras producciones de relevancia internacional, como lo fueron Tony Manero, El Club y Neruda, comenta que este premio "es un llamado para apoyar en el cine chileno, y no esperar a que las películas se ganen un Oscar para ir a las salas, porque el cine chileno es bueno".
"La gente ha respondido ahora que está feliz, que Una Mujer Fantástica tiene un Oscar, que Chile tiene un Oscar, pero yo me pregunto cuántas de esas personas han ido y han pagado su entrada para ir a ver, no solamente Una Mujer Fantástica, sino que también otras películas, otras películas de cine chileno. Porque por lo general las películas duran dos meses, salen de cartelera, y si no fuera por las salas alternativas, que no hay en todo Chile, las películas se pierden y la gente no las ve...", indicó al medio asociado SoyAntofagasta.
Sobre su participación en la película la actriz afirma que: "para mí fue genial trabajar con Sebastián Lelio, nunca había trabajado con él y encontrarme con gente del equipo que ya los he encontrado en otras producciones. Entonces es un agrado, porque sirve para generar redes de trabajo. He tenido la suerte de que me ha tocado participar en varias producciones audiovisuales que son siempre súper buenas y con desafíos interesantes, porque generalmente una no siempre tiene la oportunidad de que todo lo que te propongan sean cosas interesantes, y si bien es una escena pequeña y todo, uno también ve el trabajo que él hace con la Daniela (Vega) y es muy atractivo".
"No imaginé el oscar"
Como ella, otro antofagastino tuvo la oportunidad de poner su nombre en los créditos. Se trata de Belfor Díaz, un joven audiovisualista de 27 años que estudió en la misma escuela de Sebastián Lelio, pero fue gracias a otro contacto que pudo sumarse a la última semana de rodaje.
"Yo cuando estaba estudiando, justo en la misma escuela de donde salió el director (Escuela de Cine de Chile), me salió una pega muy random por decirle de alguna forma... Conocí a un jefe eléctrico de una productora que le gustó como trabajaba yo y me empezó a pasar pegas, y una de esas fue un refuerzo eléctrico por tres o cuatro días para Una Mujer Fantástica. Ahí dijeron que conocían a alguien que podía ayudar, así que me llamaron y me invitaron", recuerda.
Fue en diciembre del 2016 que llegó a participar en diversas escenas, como las de la clínica en el inicio del largometraje, y en la que aparece el hijo de Orlando, Bruno, en el departamento de Marina.
"Las (escenas) del hospital se hicieron todas en un día. Todo el rodaje. Otra escena que no sé de quién era el departamento realmente, pero ahí estaba la Daniela (Vega) y actuaba con otro actor (Nicolás Saavedra/Bruno), y hubo otras tres o cuatro locaciones en las que grabamos [...] pero la verdad es que yo solo conocía al Kike, que era el jefe eléctrico, que fue el que me recomendó cuando se le enfermó alguien del equipo técnico. En ese momento ni yo ni él nos imaginamos que la película iba a tener esa opción de llegar a competir en los Oscar, ni menos más encima ganarlos... jajajaja", añade.
Sobre el hecho de que sin siquiera sospecharlo participó en el rodaje de una obra histórica, explica que "es raro pensarlo... Me costó un poco asimilar que trabajé en una película que ganó el Oscar. Me costó un poco asimilarlo en un principio, pero la verdad es que a mí me da un poco de vergüenza que me entrevistaran, porque la verdad es que yo no hice tanto. Para mí ese momento ya era un logro personal estar participando en una película del (Sebastián) Lelio".
"Gratificante"
Finalmente destacamos la participación de la exalumna del Liceo Experimental Artístico, Natalia Cantillano Rojas. La hoy violinista es parte de la agrupación musical dirigida por Hernán Muñoz, "Serenarte", encargados de interpretar el arreglo de Juan Cristóbal Meza.
Su intervención es quizás la menos visible, ya que la pieza más memorable que tocaron fue representada en la cinta por un grupo de actores en la brillante escena final con Marina Vidal cantando frente al público.
"Tocamos la canción final y otra más... Pero no somos los músicos que salen en escena, sino que la música es de nosotros. De hecho en los créditos finales salimos...", comenta alegre Natalia.
"Nosotros siempre supimos que íbamos a tocar para esta película, pero esto se demora y nosotros lo grabamos en el 2016 [...] Estas canciones son arreglos de Juan Cristóbal Meza, así que nosotros también tuvimos nuestra aparición cortita en la película", explica.
Para siempre tendrá el orgullo y recuerdo de haber musicalizado la escena final de la obra más aplaudida del séptimo arte chileno, y por eso dice sentirse feliz.
"Me parece reconfortante darme cuenta de la fuerza que tiene el arte para mover y conmover a la sociedad. Formar parte activa es gratificante".