Redacción - La Estrella de Antofagasta
Convencida en que no fue un accidente cualquiera, sino que un homicidio, está la familia de Jorge Luis Robles Galleguillos, joven de 26 años que el domingo murió al ser atropellado en medio confusos y violentos incidentes registrados en la población Miramar Central de Antofagasta.
El hecho ocurrió cerca de las 14.45 horas en Avenida Padre Hurtado esquina Pajonales como trágico final de una riña. Un grupo de jóvenes se desplazó hacia el oriente hasta llegar a la vía principal, donde un automóvil que circulaba a gran velocidad rumbo al sur embistió a dos de ellos.
Uno era Jorge, padre de una pequeña de 2 años y el mayor de seis hermanos, quien cerca de las 18.50 horas murió en el Hospital Regional "Dr. Leonardo Guzmán" debido a sus graves lesiones. El otro lesionado, de la misma edad, hasta ayer continuaba en la Unidad de Paciente Crítico de dicho recinto asistencial.
Según la aún desconsolada familia del joven, en el conflicto que se desató en la parte alta, cerca de un almacén, hubo ataques con piedras y palos, pero en ello no intervino el joven, "que estaba abajo, en un muro". Su hermana Valeska Rivera, afirmó que Jorge "no tenía nada que ver en esa pelea que provocaron ellos mismos".
Relató que sólo se hizo parte al ir en ayuda de una mujer a quien quería como una mamá. "Fue a acudir cuando la madre de él, que le dice, se cae al suelo porque le tiraron una piedra. Entonces ahí el corrió a defender y viene y sale en busca...sale corriendo detrás del chico; tampoco a pegarle, porque en el video se ve que nunca lo alcanzó".
El otro joven- que está hospitalizado -se habría trabado en la riña previa con otros sujetos y estaba en compañía de parientes, al parecer hermanos, dijo Valeska.
"Vinieron y le tiraron el auto encima. Se fueron a dar la vuelta por arriba y por Galvarino se dieron la vuelta y fue donde le mandaron el impacto a mi hermano", dijo la joven que además en que "fue homicidio eso; fue con una mayor intención".
Presa aún del dolor, la muchacha indicó que a Jorge "lo atropellaron, lo mataron como un perro. Y más encima fueron capaz de irse...ni siquiera una ayuda; nada".
26 años tenía Jorge Robles, joven que el domingo murió atropellado. Su familia afirma que fue un homicidio.