Ignacio Araya
A Cristian Díaz, taltalino, 24 años cumplidos hace poco, se le metió el bichito del reciclaje hace cuatro. Entonces, comenzó a recolectar botellas plásticas en su puerto natal y ahora está en otra campaña, buscando juntar todo el papel posible que generen los departamentos de la Municipalidad de Taltal.
Díaz acaba de firmar un convenio con SOREPA (Sociedad Recuperadora de Papel) para derivar allá todo el producto que logre recolectar. Entonces, puso 25 contenedores en distintos servicios públicos de esa comuna, y está a la espera de que se llenen para luego reciclar todo ese papel, y así evitar que vaya a dar al vertedero.
"Al vertedero de la comuna le sucedió casi lo mismo que en Antofagasta: está colapsado, entonces tenemos que tratar de enviar menos basura o, mejor dicho, materia prima que se pueda reutilizar", dice el taltalino, quien es estudiante de Ingeniería Civil en Minas de la Universidad de Antofagasta.
¿Se está acostumbrando el taltalino al reciclaje? Díaz cree que sí, porque los humanos "somos anumales de costumbre", y cuesta hacerlo si no se hace el hábito. "Lo principal que busca esta campaña es que los niños se hagan la costumbre desde ya para que el día de mañana ellos le inculquen eso a sus hijos y las futuras generaciones vayan teniendo la cultura del reciclaje", dice.
En Taltal no hay empresas dedicadas exclusivamente al reciclaje, menciona. Cristian Díaz deberá enviar su papel reciclado a Antofagasta, y en el caso de las botellas, su destino final es Santiago.
Botellas
El "rey" del reciclaje taltalino cuenta, eso sí, que hubo un tiempo en que tuvieron que retirar los contenedores donde juntaba las botellas. "Había gente que le estaba dando un mal uso", cuenta. Esto, porque al echar basura al contenedor, genera un costo más alto en horas de trabajo, "y eso perjudica a largo plazo", dice.
Ahora, Cristian Díaz está esperando a que se llenen los contenedores con papel para poder reciclarlos. "La gente sí o sí se tiene que hacer la costumbre porque ésta es una oportunidad única que tiene. Nosotros estamos contando con casi la misma maquinaria que en cuanto a Antofagasta", señala el joven taltalino que se mantiene del reciclaje y con fondos que se adjudica para poder trabajar en el cuidado del medio ambiente.
3 o 4 meses, es el periodo que pasa para enviar lo recolectado a Santiago.