Piden ayuda de la comunidad para el rescate de garumas
Este jueves se encontró un centenar de ejemplares muertos en la ruta B-24 que une Tocopilla con María Elena.
l Ximena Araya Monroy
La noticia sobre la muerte de un centenar de gaviotas garumas, que fueron encontradas en la ruta B-24, que une Tocopilla con María Elena, motivó un llamado a la comunidad por parte del Servicio Agrícola y Ganadero, SAG y el Centro Regional de Estudios y Educación Ambiental, CREA, para colaborar en la captura y posterior rescate de los ejemplares sobrevivientes.
El director regional del SAG, Alexis Zepeda, indicó que concurrieron al lugar y constataron la presencia de volantones (ejemplares jóvenes que están aprendiendo a volar), muertos o moribundos.
El jefe de servicio indicó que desde el 2013 con el CREA trabajan en el interior del desierto, tratando de identificar los sitios de nidificación, que es una de las características de esta especie, para lo cual se coordinaron con algunas mineras, ante la alerta sobre la muerte de una gran cantidad de especímenes.
La semana pasada se reportó la misma situación camino a Escondida, donde las aves estaban deshidratadas y desnutridas.
"Es bastante bueno el pronóstico, si nosotros las hidratamos podemos volver a liberarlas en su medio natural en la costa", dijo el director del SAG sobre la experiencia de rescate en Antofagasta en el 2013.
Según el encargado del SAG, diversos factores incidirían en la mortandad de estos ejemplares. "Han tenido que desplazar sus sitios de nidificación producto de grandes proyectos mineros o la presión del hombre..., otro factor es que los padres se podrían encandilar por las luminarias del desierto... Podrían verse confundidas también por los espejos de agua que hay al interior del desierto de los relaves, son varios fenómenos que tenemos que analizar".
Por su parte el doctor de Biología de la Universidad de Antofagasta, Carlos Guerra, refirió que la comunidad, especialmente quienes trabajan al interior de la pampa, pueden colaborar avisando donde se avistan aves con problemas para integrar esos puntos en un plan de rescate.
Otro llamado es a informar los sitios de nidificación para generar un plan de protección y manejo de la especie. "El desierto es demasiado amplio para cubrir cada metro cuadrado", refirió el académico.
El 2013 se rescató a un centenar de especies gracias a la acción de las personas que las alimentaron.
La nueva oficina de Protección Ambiental de la Municipalidad, dirigida por Domingo Olivares se contactó con Carlos Guerra para evaluar que tipo de acciones se pueden adoptar en este caso. J
l Tanto el SAG como el CREA indicaron que algunos puntos de nidificación están identificados y ahí por ejemplo no pasa el
Dakar. En cuanto a las mineras, hay protocolos para que la gente no transite. Sin embargo los grandes sitios de nidificación se desconocen.
Una idea del académico es organizar a un grupo de voluntarios que les puedan dar alimento y agua, para así luego intentar capturarlas y coordinar su traslado al Centro de Rehabilitación y Rescate de Fauna Silvestre de la Universidad de Antofagasta.
