El relato de antofagastinos que conocieron a San Juan Pablo II
Diferentes escenarios pero una misma impresión: "Era un hombre de luz".
Eran las 21:00 horas del domingo 5 de abril de 1987 cuando Hernán Maureira esperaba la llegada del Papa Juan Pablo II detrás de su cámara de grabación.
En ese entonces, este antofagastino de 28 años, era camarógrafo de Telenorte y para la visita del Pontífice en Antofagasta, debía ser el primero en captar su arribo al colegio Santa María
"El momento en que se abre el portón del colegio por calle Baquedano, entra la escolta policial y le sigue el Papa Móvil fue lo que más me emocionó y me ha marcado en la vida. La iluminación que tenía, realmente lo hacían ver inmaculado, especial".
Maureira recuerda que el Papa saludó a todos y recibió la bienvenida en un escenario en altura. Luego bajó y en ese momento no pudo seguir grabando por encontrarse a ras de piso.
"Las cámaras de arriba en las tarimas comenzaron a hacer la pega. Entonces solté la cámara y me metí entre medio del monseñor Oviedo Cavada y el monseñor Cox, que era el director ejecutivo de la venida del Papa a Chile. Ahí le di la mano al Papa, me bendijo y me dio un rosario de plata que mi mamá me lo pasaba cada vez que yo viajaba. Cuando ella falleció se lo puse en su pecho". Maureira lo acompañó luego a la cárcel, durante la Gran Eucaristía del Norte Grande hasta su despedida en el aeropuerto.
De su encuentro con el Pontífice, recientemente canonizado, el actualmente camarógrafo de TVN, indicó que: "Me emocioné tanto que me abrazó Carlos Oviedo Cavada".
Años más tarde, también tuvo la oportunidad de conocer al Papa emérito Benedicto XVI cuando visitó la ciudad como cardenal. Le dio la comunión.
El escenario donde muchos pudieron verlo y escuchar su mensaje fue en el llamado Campo Eucarístico, ubicado en lo que ahora es la Población Juan Pablo II.
La preparación fue minuciosa y cada parroquia envió un solo representante para que recibiera la comunión de manos del Pontífice. En la Madre de Dios, Pablo Reinoso, de 12 años fue escogido para aquello por su compromiso con la iglesia.
"Del Vaticano me dieron la credencial y las indicaciones. Tuvimos que llegar de madrugada. Cuando fue el momento de recibir la comunión, subí al altar y la recibí".
Para Reinoso la imagen del Papa lo ha acompañado siempre. "Su rostro expresa bondad". De hecho la vida parroquial de Pablo fue siempre destacada.
La historia de Gonzalo Quiroz, exdirector regional de Injuv fue en un contexto diferente. En diciembre de 2001 viajó junto a su familia Roma. Todos estaban invitados a presenciar una multitudinaria "audiencia papal".
"Yo estaba entre el público y de repente iba pasando todas las barreras se seguridad hasta que llegué a la última valla papal. Ahí me percaté que estaba el ministro del gobierno italiano a la espera para saludar al Papa y que lo acompañaban 5 personas. Sin pensarlo, cuando pasaban uno por uno al escenario, me metí y subí, desplazando al real acompañante".
Cada uno de los invitados llevaba un regalo. Cuando lo vieron a él, el ministro no entendía que hacía ahí. Luego se percató de que el verdadero estaba en el otro extremo tratando de pasar. "El ministro no se enojó, al contrario, dijo que si había logrado llegar hasta ahí era por algo. Saludé al Papa, le dije que era de Chile y él sonrió y dijo: 'Qué Dios bendiga a Chile y Sudamérica". Para Gonzalo fue un momento de emoción y nerviosismo que jamás lo olvidará. J
Juan Pablo II estuvo 6 días en Chile. Llegó a las 16 horas del 1 de abril y voló desde Antofagasta hacia Buenos Aires a las 12:50 horas del 6 de abril. Su visita durante el Régimen Militar sirvió para distender en cierta medida las tensiones políticas de ese entonces. Ayer, el exPontífice fue proclamado Santo junto al Papa Juan XXIII por el papa Francisco en Roma. También estuvo el Papa emérito Benedicto XVI.