Los proyectos que ponen fin al lucro con recursos públicos en el sistema escolar, la selección en el ingreso y el copago, además de un cambio en la institucionalidad para el nivel pre básico, llegarán hoy al Congreso para iniciar su tramitación, tras recibir ayer la firma de la Presidenta Michelle Bachelet. El paquete es parte de la reforma al sector y fue atacado por la Alianza, donde la calificaron como un 'atentado a la diversidad y a la clase media'.
La iniciativa establece que en dos años los colegios particulares subvencionados deben definirse como fundaciones o corporaciones sin fines de lucro. Esto los obligará a reinvertir en los establecimientos sus excedentes. Quienes se nieguen pueden convertirse en pagados, cambiar su giro o incluso tasar su infraestructura y vendérsela al Estado.
El fin del copago significa que en los subvencionados el dinero que aportan las familias ahora sería pagado a los sostenedores por el fisco. Hoy las 1.200.000 familias que tienen a sus hijos en esos establecimientos pagan más de US$ 500 millones anuales por ello. Si el proyecto se aprueba la colegiatura la cancelaría el Estado. El ministro Nicolás Eyzaguirre dijo que para esto el monto fiscal triplicará ese monto, porque incluye la entrega de recursos extras al sector público. El proyecto prohibe la seleccionar a los alumnos para el ingreso hasta cuarto medio en todo colegio que reciba dineros públicos. Sin embargo, le permitirá a los liceos emblemáticos que acepten el ingreso a partir de las notas que los niños que promediaron en sus escuelas de origen.
Representantes de la UDI advirtieron que se opondrán a los proyectos. La senadora Ena von Baer defendió el 'emprendimiento privado' y aseguró que la propuesta deja en incertidumbre a las familias, que no saben lo que ocurrirá con los colegios donde estudian sus hijos. El presidente gremialista Ernesto Silva, añadió que ninguna de las propuestas apuntan a mejorar la educación. 'Para estos proyectos no vale la pena quitarles más recursos a los chilenos', comentó.J