Valery Reyes y Pablo Torres dicen que ya se han cansado de golpear puertas y de rogar a las autoridades locales para que tanto ellos como cientos de otras personas que sufren de algún tipo de discapacidad físico-motora, puedan tener un trato igualitario a la hora de utilizar el transporte público. Estos muchachos dicen que en general todos están muy contentos con las mejoras en los accesos de los edificios públicos y de los diferentes balnearios de la capital regional, pero ya han esperado suficiente para ver mejoras en algo que sigue siendo un problema diario.

l Para el recorrido de mañana dicen que es importante que asista la mayor cantidad de vecinos posibles, por lo menos hasta el momento ya cuentan con varias familias que se comprometieron a apoyarlos.