Fundado el 2 de Mayo de 1966
Director:
Sergio Mercado Richards
Representante legal:
Carlos Rodríguez Pérez
Domicilio:
Manuel Antonio Matta 2112
Fono:

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Carlos Rodríguez Pérez
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dinos lo que piensas
En cada hogar existe un lugar en el patio donde acumulamos lo que es peligroso para la familia, o simplemente lo que no nos sirve. A ese lugar no le damos importancia y guardamos en él los cachureos que por años acumulamos y por alguna razón no hemos querido deshacernos. Están a la espera de ser desechados en la basura por peligrosos o inservibles.
En los últimos años algo ha pasado con la ciudad de Antofagasta, a la cual una familia muy poderosa de Chile ha convertido
-en diferentes oportunidades y con distintos elementos almacenados- en su patio privado de elementos contaminantes y peligrosos para el ser humano. Así coloca en peligro la salud de todos los antofagastinos y demuestra una y otra vez la desidia por la ciudad y sus habitantes.
Todos recordamos los cerros de de plomo que se levantaban en los patios del ferrocarril Antofagasta-Bolivia. Plomo que era llevado y esparcido democráticamente por los vientos de la 'Perla del Norte' durante todo su trasporte y almacenamiento a los pulmones de los ciudadanos. Niños, ancianos y adultos sufren aún los resultados de dicho almacenaje fuera de toda norma ética, moral y técnica de país medianamente desarrollado.
Hace 14 años el Colegio Médico de Antofagasta midió el plomo en la sangre de las personas que vivían frente a las montañas de polvo gris azulado. 65% de la gente que se tomó muestras estaba contaminada y entre los afectados había 70 niños. Ante la evidencia, la seremi de Salud de la época dictaminó que se hiciera un seguimiento de casos, que se ampliara el examen a más personas y que el plomo se fuera de la ciudad. La primera medida no se cumplió, la segunda se implementó a medias, porque la toma de muestras no fue masiva, y la tercera se llevó a cabo: desde 1998 el plomo que viene en tren desde Bolivia ya no se acopia en el centro, sino en Portezuelo, 33 kilómetros al Este de Antofagasta.
En 2006 nuevamente las muestras fueron tomas en los sectores aledaños al patio de acopio de Portezuelo. Luego en diversos puntos de la llamada 'ruta del plomo', que atraviesa Antofagasta hasta el puerto, a las afueras de instalaciones industriales del sector La Negra, y en tres sectores poblacionales: Coviefi, Playa Blanca y Jardines del Sur. En todos estos lugares también quedó en evidencia una grave contaminación por metales pesados.
Por otra parte el agua de mar antofagastina contaminada con algas marinas y distribuida durante varios días a la población de la ciudad, hizo noticias nacional hace algunos años. Los filtros de la planta desaladora y los controles de seguridad no fueron suficientes para detectar y detener esta contaminación a tiempo. Entonces muchas voces científicas pusieron la voz de alerta, en el sentido de qué hubiera pasado con la salud de las personas, si esta contaminación hubiera presentado un peligro mucho mayor para la salud y la vida de las personas.
Ricardo Rabanal Bustos
profesor