Por intermedio de la presente, junto con saludarlo, quisiéramos brindar nuestros agradecimientos a la brigada de emergencia de la Compañía Minera Centinela (exminera El Tesoro) de los grupos de brigada N°3 y N°4, en especial a don Carlos Maldonado Pontigo, y a todo el personal de ejecutivos y trabajadores que componen esta prestigiosa empresa minera, por la construcción del baño del segundo piso de nuestra compañía y alajamiento de otras oficinas del cuartel.

Esta dependencia que cuenta con sala de vestuario, duchas y servicios higiénicos permitirá mayor comodidad a los voluntarios y voluntarias que cumplen con la guardia nocturna de la compañía.

La Segunda Compañía de Bomberos 'Salvadores y Guardias de Propiedad' fue fundada el 22 de diciembre de 1880 y está ubicada en calle 21 de Mayo N° 400. Pertenece al Cuerpo de Bomberos de Antofagasta y tiene una dotación de 74 voluntarios, cuatro carros bombas (Porta Escalas Q-2, Telescópico M-2, Agua B-2 y la nueva ambulancia de rescate bomberil tipo 911).

Además, poseemos un carro telescópico marca Pirchs año 1951 que prestó servicios hasta 1986 y que fue importado directamente desde Estados Unidos a Antofagasta.

En la actualidad estamos haciendo las gestiones para su restauración.

Por estas razones, sabedores de su espíritu de cooperación y profunda identificación con las instituciones centenarias de Antofagasta, es que queremos molestar su atención para lograr una amplia difusión de nuestro agradecimiento a la Compañía Minera Centinela, a su brigada de emergencia y a todos los ejecutivos y trabajadores que la componen.

Denisse Rojas Acevedo

secretaria

Ricardo Rabanal Bustos

director

Segunda Compañía de

Bomberos S. y G. de P.

En muchas reparticiones públicas y empresas privadas, la atención al público ha ido mejorando. La burocracia poco a poco va emprendiendo su retirada. Sin embargo, siempre hay un pero: Cuando vamos a esos lugares y estamos siendo atendidos, nos sentimos felices porque saldremos pronto, pero de repente, sucede lo inesperado ¡Oh!, una llamada telefónica y hasta ahí no más llegó la ágil y expedita atención. Cinco y hasta 10 minutos, esperando el reinicio de lo que había comenzado tan bien. Muchas conversaciones relativas al trabajo, pero las otras, con las últimas noticias. Sería bueno que estas entidades, tuvieran una central telefónica donde concentrar las llamadas y derivarlas cuando sea de una real urgencia. Ganarían más con ello, pues 'el tiempo es oro'.