Realmente me da pena cómo Chile, de la noche a la mañana, después de estar 'puntero' en muchos aspectos, ahora está a punto de caer a segunda división.

Es enorme la cantidad de gente que está quedando sin trabajo, muchas, y lo que es peor, la ola de alzas que hay y que están atormentando a la población. Con un gobierno mentiroso de principio a fin, donde desde la sra, pasando por todos los ministros, decía que las famosas reformas, especialmente la tributaria, no iba a afectar a la clase media y baja.

Estamos viendo por nuestros propios ojos que los precios de los alimentos y todo lo demás han subido una barbaridad, y eso que todavía ni se pone en funcionamiento la famosa reforma.

Para qué hablar de las viviendas, o sea todo mal. Un banco mundial, hace pocos días, les comunicó a todos los inversionistas no invertir en Chile, que era muy riesgoso por todo lo que está pasando aquí, y especialmente por la reforma tributaria.

Chile ha bajado en todas las estadísticas mundiales, especialmente económicas y el gobierno es el responsable. Están haciendo leyes a 180 kilómetros por hora, donde un día se dice una cosa, y al día siguiente se hace otra. Donde hay un despelote total en todos los partidos que lo apoyan.Un ministro de Educación que dice no tener idea de educación, pero está y sigue ahí. En fin, han bajado las ventas en los supermecados, tiendas, venta de autos, de casas, proyectos nuevos paralizados, y para qué seguir.

Y esto es reponsabilidad de aquellos que para las elecciones presidenciales se quedaron en casa. Las pocas personas que fueron a votar, eligieron este gobierno, y lo que estamos viendo es el resultado de aquella irresponsabilidad.

Para qué hablar de la delincuencia, de la justicia, de la pasividad de los chilenos. Los pueden estar matando y se quedan callados. Tenemos los remedios más caros del mundo, nos suben cada semana los combustibles, y nos llenan de impuestos. Más ahora que con la reforma nos caerán encima muchos impuestos. Por todo hay que pagar. Las isapres tienen millonarias ganancias, donde el sistema previsional es un desastre.

Dos personas trabajaron en la misma empresa. Uno se quedó en el sistema antiguo, y el otro se cambió a la AFP. Hoy con 65 años de edad, el que se quedó en el sistema antiguo recibe $410.000, y el de la AFP, ayer le comunicaron que recibirá $110.000. Un abuso brutal y criminal.

Ahora tiene que ir a la municipaidad, donde hay un programa que ayuda a estas personas, con un bono de $60.000 para llegar a los $170.000. Pero no se toca a las AFP.

Incluso más. El gobierno crea otra AFP, ¡uf!, no podemos seguir siendo tan, tan, pero taaan giles. ¿Hasta cuándo? ¿Hasta cuándo los ciudadanos de este país se dejan estafar, se dejan robar todos los días? ¿Hasta cuándo tanta pasividad?

Gracias sr. director,

Juan Bennett