Que se diga que Chile es un país solidario, se le está mintiendo a la gente.Yo no entiendo el doble estándar de este país, que por lo demás lleva años instalado en Chile.

Ahora, que se diga que la gente modesta de Chile es solidaria, ahí sí que estoy de acuerdo en un 100%.

Y cuando llega el tiempo de la Teletón, es admirable lo que 'habla y dice' la gente. Es conmovedor. Pero al momento de hacer efectivo esos sentimientos en la vida diaria, no lo hace. Es cosa de recordar muchas situaciones del día a día que vivimos. Están agrediendo a una mujer en plena calle, y los imbéciles en vez de ayudar a esta mujer, se ponen a grabar la situación.

Están agrediendo a una estudiante, y todos los imbéciles se ponen a grabar. Y esto sucede en muchas situaciones del diario vivir.

No se ayuda para nada a gente, que por ejemplo necesita cruzar una calle, a darle el asiento a una mujer, o a un abuelito.

Es realmente impresionante ver que hay un total desinterés por el prójimo. Y en las instituciones también.

Por ejemplo el 20 de octubre, fecha de pago de jubilaciones, pensiones, etc. en el Servipag ubicado en calle San Martín, se eliminó la caja exclusiva para las personas de la tercera edad y con discapacidades. Llevé a un familiar, que a causa de la diabetes está en silla de ruedas, porque le falta una pierna. Y el guardia dice que tiene que ponerse en la fila, porque 'se eliminó la caja especial que había, porque muchas personas se aprovechaban de la situación y se ponían en esta fila sin estar enfermos ni discapacitados. Así es que se eliminó'.

Mal por aquellas personas irresponsables, vivarachas, e idiotas que se ponían en dicha fila, porque por culpa de estos imbéciles, pagaron las consecuencias los y las abuelitas y personas discapacitadas, que tienen que 'mamarse' bastante tiempo para ser atendidos.

Pero vamos también por la determinación que tomó el jefe de dicho local, porque un jefe más responsable y humano, hubiera dejado por lo menos a las personas con bastones, muletas y silla de ruedas atenderse en una caja especial. Si no es por la caridad de un sr. que estaba en la fila, que le dio la pasada a mi familiar, ésta es la hora que todavía está allí.

Falta humanización, falta tener dos dedos de frente en la jefatura de esta empresa, y falta responsabilidad de las personas que como siempre, cuando una empresa otorga un servicio especial, no falta el idiota que todo lo hecha a perder. Recuerdo que en Escondida daban de colación una bolsa bastante grande, que traía de todo. Hasta que algunos idiotas se les ocurrió, cuando bajaban, venderla en la ciudad y en la feria Las Pulgas. Y otros, más idiotas, las botaban en la misma mina. Pregunten ahora de qué porte son las bolsas de colaciones... Así es el chileno. Y da mucha pena que existan personas que le causan daño a otros seres humanos, más aún si son discapacitados.

Gracias sr. director.

Juan Bennett