Cuando el cielo de Taltal amaneció tras el desastre del jueves, las caras de sus vecinos reflejaban, además del dolor, la incertidumbre. Fueron tan inesperados los aluviones que arrasaron la ciudad, que el rumor comenzó a correr de boca en boca. Que viene de nuevo, que no viene, que las piscinas se rebalsaron.

Y por suerte, el único río de agua que corrió ayer por la devastada comuna fue una rotura de matriz de Aguas Antofagasta, que fue sofocado durante el día. Los vecinos comenzaron a salir a las calles, a limpiar sus casas, a ver qué se pudo salvar del torrente de barro que vino de improviso desde las quebradas.

"Lamentablemente Taltal está parado completo, es lamentable, duele mucho el corazón, dan ganas de llorar… de decirle a Dios que nos ayude rápidamente", decía al teléfono el alcalde, Sergio Orellana. La Municipalidad de Taltal llegó a emitir certificados para pedir a sus vecinos que les faciliten palas y carretillas, "el cual será devuelto o restituido en un plazo de quince días".

EL RETORNO A CASA

Como sea, la situación comienza a normalizarse, por fin. La presencia militar se nota en las calles, y en Paposo y Cifuncho no hay mayores problemas. Hasta ayer, había unos cincuenta refugiados en los albergues que habilitó la municipalidad, pero como cuenta el alcalde Orellana, "el nortino no es muy de permanecer en los albergues". Es por ello que en las juntas de vecinos se habilitaron lugares para que la gente que así lo necesitase, pudiese dormir ahí.

Aunque ya comienza a llegar la ayuda y -sobre todo- la información para tranquilizar a los taltalinos, ellos siguen mirando hacia las quebradas, donde están las piscinas aluviales que frenaron el paso del que pudo haber sido un desastre mayor. "Cada piscina tiene 140 mil litros de agua, están llenas, y por un lado, hay que agradecer al Ministerio que eso se hizo. Si uno lo mira fríamente, sirvió bastante", cuenta Orellana.

La tarea de Taltal ya comenzó, y el siguiente paso, además de limpiar el lodo que entró a las casas y calles, es reconstruir las partes de casas que se llevó el torrente. "Las necesidades son muchas, pero hay que equipar a la gente con materiales de construcción", señala el alcalde, quien aseguró que se tratará de preparar los colegios de la comuna para el caso que se necesiten albergues a futuro. Porque así como nadie pudo prevenir lo que pasó esta semana, lo mejor es estar preparados para adelante.

En tanto, ayer llegó a la ciudad la Presidenta Michelle Bachelet, para coordinar la situación junto al intendente regional Valentín Volta. J

l Luego de dos días sin una cifra exacta, finalmente ayer se precisaron en 5.856 las personas que quedaron damnificadas en la comuna de Antofagasta, según cifras preliminares entregadas por la Dirección de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Antofagasta.

Los afectados corresponden a una cifra total de 1.503 familias que resultaron con daños menos graves en sus viviendas, concentrándose en los sectores altos de la ciudad, lugar donde se reportaron desprendimientos de material e ingreso de agua y lodo, en especial a los sectores cercanos a las quebradas.

En tanto, durante la jornada se recepcionó ayuda en las universidades de Antofagasta para los damnificados por el mal tiempo. J

l Nueve vecinos que habían quedado atrapados en el sector de Cifuncho fueron rescatados por carabineros del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) de Antofagasta.

La evacuación fue necesaria luego cerca de las 4 de la madrugada tres vehículos particulares y una ambulancia que iban a Taltal quedaran aislados, a altura del kilómetro 15 de la Ruta 1, debido a un gran desplazamiento de agua, lodo, y piedras. La tensa situación motivó que un patrulla de la sección especializada llegara de infantería hasta el lugar donde estaban los afectados, entre ellos un diabético descompensado.

Luego de casi 12 horas culminó el rescate en forma exitosa, con el apoyo de un helicóptero institucional de Coquimbo. J

l Una visita a los juzgados de la capital regional realizó la presidenta del tribunal de alzada, Myriam Urbina Perán, para constatar cómo quedaron los tribunales tras el frente de mal tiempo en la región.

En el Juzgado de Letras del Trabajo, la ministra constató la inundación de las salas de audiencia, obligándose a suspender y reprogramar las mismas.

En tanto, en los juzgados civiles sufrieron la interrupción del suministro eléctrico, y de las líneas telefónicas. La unidad de atención al público del Primer Juzgado Civil quedó inutilizada por el agua. Asimismo, se informó que durante los próximos días se deberían realizar los trabajos de reparación. J