Redacción
El martes, a las 13 horas, conocerá su sentencia Brayan Marcelo Julio Véliz, líder de la banda juvenil "Los Lula" y conocido en el mundo delictivo como "Brayan de la Chimba", quien ayer fue condenado en forma unánime por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal por el homicidio de un vecino, ocurrido el año pasado en el extremo norte alto de Antofagasta.
La acusación contra el joven de 20 años estuvo a cargo del fiscal David Cortés Alfaro, quien expuso los hechos registrados el 1 de agosto, cuando junto a otros jóvenes, Julio Véliz llegó hasta calle Amatista, cerca de Huamachuco, ubicándose detrás de un árbol.
Allí, con un tipo rifle efectuó diversos disparos contra la casa signada con el número 741 de calle Amatista. Uno de los tiros dio en el cuerpo del vecino Gustavo Albornoz Martínez, quien permanecía junto a su esposa en el segundo piso y no conocía a Brayan.
La investigación fiscal determinó que los disparos iban en realidad dirigidos a otra persona que vivía en dicho hogar, sin embargo Albornoz Martínez se convirtió en la víctima fatal del ataque cuatro días después, a raíz de una herida tóraco abdominal por arma de fuego.
Por espacio de dos días, la Fiscalía presentó en el juicio prueba testimonial, pericial, documental, fotográfica y planimétrica que llevaron a los jueces a dar por acreditado tanto el delito como la responsabilidad que en el mismo cupo al imputado.
Brayan Julio se posicionó en el lugar de los hechos y reconoció ante el tribunal haber efectuado disparos. Su defensa, en tanto, intentó instalar en los jueces la duda razonable ya que pudo haber sido otra persona que hizo disparos en forma conjunta con Julio Véliz, la que hirió a la víctima.
Pese a lo anterior, todos los testigos del hecho que declararon en el juicio dijeron que la única persona armada que llegó hasta el lugar fue el imputado y que éste fue el único que disparó.
El fiscal y las abogadas querellantes solicitaron aplicar una pena de 10 años y un día de presidio.
Pidieron su traslado
La defensa de Brayan Julio solicitó trasladarlo a la cárcel de Calama, debido a que ha recibido amenazas en el penal de Antofagastino.
A la acusación de la Fiscalía adhirieron dos abogados querellantes, una en representación de la familia de la víctima y otra de la persona a la que originalmente iban dirigidos los disparos.