El 1 de septiembre, Pinochet anuncia que todos los exiliados por la dictadura -430 en ese momento- podían volver al país después de largos quince años. Uno de ellos es Domingo Claps, que hasta 1973 fue diputado por Antofagasta, representando al Partido Socialista. "Creo que el exilio es una de las cosas más duras que uno tiene que soportar", dice el exparlamentario, que venía llegando desde México.

Paranal comienza a tomar forma

El telescopio más grande del mundo, Paranal, comienza su camino en el 88, cuando el Gobierno le cede 72.500 hectáreas a la Organización Europea para la Investigación Astronómica (ESO). En ese momento, la construcción del observatorio se estimaba en diez años, pero se inaugura un poco antes, en diciembre de 1996.

Al león de la Plaza Colón lo bañan en bronce

Algo desgastado estaba el león de la Plaza Colón en noviembre, tanto que el alcalde Patricio Valdivia manda a sacarlo y darle un baño de bronce para recuperar las zonas del felino que estaban dañadas con el tiempo.

El trabajo en el león estuvo enfocado también en su lomo, y esa pega la tomó el escultor William Rivera. El costo, en ese tiempo, fue de 80 mil pesos.

Ignacio Araya Chanqueo

A un año de finalizar el período presidencial que le confería la Constitución, el dictador Augusto Pinochet llama a plebiscito para el 5 de octubre del 88. La pregunta al votante es si desea que él asuma el mando del país durante ocho años más, es decir, hasta marzo de 1997. Sí o no. Así de simple.

Todos los ojos del mundo están puestos sobre Chile y las semanas previas, en Antofagasta, la tensión está en el ambiente. Mario Escobar, administrador de la casa del "Sí", denuncia que una camioneta café "que participa muy activamente en las caravanas del No", sale a las calles a amenazar a dirigentes poblacionales.

El voto de Antofagasta se lo pelean todos. En una sola semana viene Pablo Rodríguez, ex Patria y Libertad; Miguel Otero, Eugenio Velasco y Ricardo Lagos. Otero, entonces vicepresidente de RN, lidera el "mujerazo" por el Sí en el Gimnasio 21 de Mayo. Lagos se reúne con tres trabajadores en María Elena y los despiden del trabajo. Carlos Cantero, alcalde de Calama, dice que el No es una invitación al caos. "El triunfo del No es un suicidio colectivo", asegura. Incluso un sector de la DC llama a votar Sí.

La noche del 30 de septiembre, el Sí termina su campaña con miles de personas desfilando en el centro y en Calama, canta Wildo e Irene Llano para apoyar a Pinochet. La campaña del No, en tanto, termina en el Parque Japonés. "El No es la única alternativa que permitirá que en este país terminen las injusticias, la represión, el terror", aseguran.

Llega el día 5 y 686 mesas esperan a la Segunda Región. Mientras iba a votar a la Escuela D-121, una antofagastina dio a luz a su bebé ahí mismo. Cuando lo tuvo, fue a votar y después recién se fue al Hospital. Andrés Sabella votaba en el Liceo A-15, mesa 82. "Este interés se debe a que la gente ha estado esperando por 15 años para participar en un acto de esta naturaleza", dice. En el lentísimo recuento de votos, los pocos nulos eran dibujos de corazones y flores...

Como se sabe, los resultados se dieron tardísimo, pasadas las 2 de la mañana se supo que había ganado el "No". En la región de Antofagasta, el 60% de los votos fue el mayor porcentaje a favor del "No" en el país... y no hubo suicidio colectivo. "El reconocimiento del triunfo de la opción No es una muestra más del alto espíritu cívico y democrático del gobierno", dijo después Carlos Cantero.

El 23 de noviembre aterriza en Antofagasta Pablito Ruiz, ídolo juvenil y visita frecuente de la tele que con su "Oh mamá, ella me ha besado" era comparado con el mismísimo Luis Miguel. El artista tuvo la mala idea de avisar que estaría en una radio de Calama, porque llegaron tantas fanáticas que tuvo que intervenir Carabineros para que no lo dañaran. Recién a las horas pudo zafarse para seguir camino.

Pablo, de entonces juveniles 14 años, no tenía miedo del dramático pero natural proceso de cambio de voz. "Tengo muy buen oído y pienso que voy a seguir cantando siempre", dice. Consultado por la fanaticada que casi se lo come vivo, él explicaba que eso "era natural".

"Estuve muerta por tres horas"