Damir Galaz-Mandakovic Fernández (33) es un tocopillano que por motivos de estudios -está terminando su doctorado en antropología e historia en la Universidad de Rennes- se encuentra en Francia y describe la situación de dicho país, luego del atentado del jueves y que, hasta el cierre de esta edición, arrojaba un saldo de 84 personas fallecidas, como "escalofriante".
"Niza es una de las ciudades turísticas más importantes de Francia. Estamos en verano y la fiesta nacional es una de las principales actividades. Si con los atentados a Charlie Hebdo y la masacre de Bataclan se mató la libre expresión, la vida en los cafés, los conciertos... Con lo de Niza se ataca a un foco turístico. Es la necropolítica de Isis que está apuntando a focos cotidianos".
Galaz-Mandakovic, quien es profesor de historia de la Universidad de Tarapacá, cuenta que la embestida del camión como una "mortal innovación". "El país está militarizado. Estuve en París para la Eurocopa y había miles de militares, la ciudad estaba sitiada, muy controlada y hubo muchos detenidos (…) El temor es grande, sobre todo por la angustia de saber que en cualquier momento puede ocurrir algo y en esto cae cualquiera. Cualquier persona puede morir, es por eso que el gobierno recomendó no salir de las casas".
Consultado si el atentado sería de carácter racista, Galaz-Mandakovic dio un categórico no. "Acá el tema no es por los migrantes, es netamente político. Tiene que ver con las actuaciones de Francia en Medio Oriente, con las reivindicaciones de algunos grupos islámicos. Es un tema que cruza militarismo, religión, colonialismo, recursos naturales (petróleo), culturales y formas de entender el mundo desde distintas etnicidades".
El tocopillano finaliza contando que "ahora hay duelo nacional, las calles están vacías y se extendió el estado de sitio. Eso implica suspender algunos eventos masivos y los militares están en la calle".