Ignacio Araya Chanqueo
Toda una odisea tuvo que vivir una tortuga marina que la semana pasada fue hallada por un pescador de Pisagua (I región) con una seria herida en su mandíbula, y que ahora se recupera tranquilita en el Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Universidad de Antofagasta.
Luego que el pescador avisara a una patrullera de la Armada en Iquique, comenzó el viaje de la tortuga a la Universidad Arturo Prat, para evaluar su lesión. Sin embargo, allá se dieron cuenta que el daño era tan grande, que no quedaba otra que llevársela hasta la Universidad de Antofagasta, donde opera el Centro de Rescate.
"Esta tortuga fue derivada desde Iquique, donde se hizo todo un operativo, se realizó una posta, vía terrestre, donde los colegas de la Primera región la trasladaron hasta la desembocadura del Río Loa", cuenta el director regional de Sernapesca, Carlos Herrera. En el límite con la Región de Antofagasta, tomó la tortuga un personal de la oficina de Tocopilla para seguir la travesía en camioneta. En Michilla, el equipo de la II Región se la trajo hasta la UA.
Según el profesor Carlos Guerra, director del Centro de Rescate, se le hicieron exámenes a la tortuga para evaluar qué le pasaba exactamente. "Tiene una herida en la garganta y una fractura en dos huesos que son súper complicados porque les dificulta para abrir y cerrar la mandíbula", explica. Mientras se recupera totalmente, a la tortuguita la están alimentando con papillas que les dan por una sonda.
¿Qué pudo haber pasado con la herida que tiene la tortuga y que le impide comer normal? "Es muy extraño", dice el profe Guerra. "Vamos a ver cómo evoluciona, si es que es posible que vayan soldando esos huesos, porque meterse dentro es muy riesgoso", cuenta. Mientras tanto, la tortuga espera algún momento su regreso a las tranquilas aguas de Pisagua donde un pescador la halló, pero aún deberá pasar por un largo tiempo de recuperación.
ignacio.araya@estrellanorte.cl