Cartas
Alimentación saludable
El cerebro tiene trillones de células llamadas neuronas. Y estas maravillosas células funcionan y se relacionan como una red telefónica. Esta relación es posible gracias a unas sustancias químicas que producen las neuronas. Para producir estas sustancias químicas, las neuronas deben estar bien alimentadas. Necesitan el combustible adecuado que es la glucosa. Gran parte de la glucosa (azúcar) que recibimos se va al cerebro para permitir que efectúe adecuadamente todo su trabajo en el pensamiento, la memoria, la capacidad de razonar, etc.
Esa glucosa proviene de los hidratos de carbono de la alimentación, pero no de cualquiera. Hay que consumir aquellos que liberan lentamente la glucosa a fin de conseguir un aporte permanente y progresivo. Para lograrlo hay que consumir alimentos como las frutas, verduras, alimentos integrales y avena y se deben evitar los dulces, helados, pan blanco, caramelos, galletas y otros. También es importante que se consuman más comidas durante el día que las que ingerimos habitualmente. Es importante que el desayuno sea abundante, y además consumir alimentos ricos en omega 3 como pescados (salmón, atún, sardinas y anchoas), porque ayudan a la función cerebral.
