Cartas
Elecciones municipales
El 23 de octubre se realizará un nuevo acto electoral para la elección de alcaldes y concejales. Esta será la primera elección popular que deberá ajustarse a las nuevas normas sobre probidad y financiamiento electoral, todo lo cual busca restringir prácticas tradicionales que, a través de una siniestra vinculación del dinero y la política, se distorsiona el sentido de una real democracia representativa, ya que la función de servir al interés general se orienta más a ciertos intereses particulares. Es difícil pensar que una competencia política sea efectiva en tanto los candidatos y posteriores autoridades electas, tengan prescindencia absoluta de las aspiraciones de los aportantes, que con sus altas contribuciones posicionan, y visibilizan más a algunos candidatos en desmedro de otros, lo que les permite más fácilmente ser electos. Las modificaciones a la ley 19.884 sobre financiamiento electoral, dispuestas por la reciente ley 20.900, establece mecanismos de mayor control por parte del Servicio Electoral; máximos de aporte y gastos electorales; mayor transparencia, y mayor intervención del Estado en el financiamiento. Así también más involucramiento de los partidos políticos en el bien común.
