Universidad Católica se convirtió en el quinto equipo chileno en transformarse en bicampeón del fútbol chileno, con el título del Apertura y Clausura conseguido este año.

Los cruzados, que en 2016 ganaron ambos campeonatos, saldaron además una cuenta pendiente con su historia, donde varias veces quedó ad-portas de lograr dos coronas en forma consecutiva.

El Apertura, que se jugó en el segundo semestre, tuvo a dos equipos luchando punto a punto el campeonato. Deportes Iquique y Universidad Católica lucharon hasta la última fecha por ser el mejor del fútbol chileno, pero fueron los dirigidos de Mario Salas los que alcanzaron la estrella para la UC y la clasificación para la Copa Libertadores.

El primer bicampeón fue Magallanes, quien ganó los tres primeros torneos que se disputaron en nuestro país. Luego vino el turno de Universidad de Chile, que en la época del "Ballet Azul" logró de manera consecutiva los títulos de 1964 y 1965.

El mundo entero se hizo

hincha del Chapecoense

Fallecieron 71 personas en el accidente, casi toda la delegación del equipo de Chapecó (Brasil) que se dirigía a Medellín Colombia para jugar la final de la Copa Sudamericana.

El mundo sintió como suya la tragedia. En todos los rincones del planeta se realizaron minutos de silencio en memoria a quienes viajaban en el avión de la línea área privada Lamia.

Los principales íconos del mundo se tiñeron de verde y en todos los estadios abundaron los homenajes para quienes perdieron la vida en este accidente, que según los expertos, se pudo haber evitado porque fue producto de la negligencia de la empresa que trasladaba al equipo, dirigentes y periodistas.

La tragedia aérea del Chepecoense es el golpe más duro recibido por el mundo del deporte en los últimos tiempos.

Mauricio Riquelme C. - La Estrella Antofagasta

La espera de 100 años valió la pena. La generación dorada del fútbol chileno nos regaló la segunda Copa América pero esta vez centenaria, única en su especie y que se jugará en 100 años más, cuando ninguno de nosotros esté presente en forma terrenal.

Así de importante fue el logro obtenido por el equipo de Claudio Bravo, Arturo Vidal, Gary Medel, Alexis Sánchez y compañía.

Fue un campeonato que tuvo de todo para Chile. Goleadas, expulsiones, lluvias torrenciales, penales, pero al final del camino, una copa dorada única en su especie.

La ruta de Chile a la final no comenzaba de la mejor forma. Debutaba con una derrota (2-1) ante Argentina.

Las miradas estaban puestas sobre Juan Antonio Pizzi. El equipo no era el mismo que había ganado la Copa América un año antes con Jorge Sampaoli.

Pero "Macanudo" no se desesperó. No cambió su filosofía de juego y salió a buscar el triunfo ante Bolivia en la segunda fecha. Un penal en los descuentos le dio un sufrido triunfo a la "Roja" por 2-1.

El cierre de su grupo fue goleando a Panamá por 4-2 con goles de Sánchez y Eduardo Vargas.

Era la inyección de energía que necesitaba Chile. En cuartos de final se enfrentaba a México, una selección que venía invicta. La duda entre los hinchas estaba presente, pero el 7-0 que le propinó la "Roja" a los aztecas sigue resonando hasta el día de hoy en el país del norte.

La semifinal frente a Colombia estuvo marcada por la tormenta de lluvia que detuvo el partido por una hora y media.

Chile ganaba 2-0 antes de la media hora del primer tiempo. Goles que mataron las ansias cafeteras.

Para la final estaba reservado lo mejor. Chile ante Argentina. Se repetía la final del 4 de julio en el Nacional. Era hasta el mismo libreto. Sin goles hasta los 120 minutos de juego, así que había que ir a los penales.

La historia se repitió calcada. La "Roja" ganó en penales a la argentina, desatando la alegría de los Supercampeones.