Pobladores están aburridos de la polución de las ripieras
Vecinos del sector norte reclaman por la extracción de áridos cerca de sus casas. Aquella situación, según gobernadora, estaría finalizando.
Redacción - La Estrella de Antofagasta
Si uno toma la avenida Arturo Pérez Canto y se va derechito hacia arriba, con dirección a los faldeos de los cerros, nos encontraremos con tres plantas que se dedican a la extracción de áridos y que, a simple vista no se ven porque los mismos desniveles y pequeños cerros, "esconden" las instalaciones.
Don Guillermo Rojas, comerciante y vecino del sector, llamó a este Diario para dar a conocer la situación que vienen soportando hace más de un año y que ya ha sido publicada en este medio pero ahora sería insostenible, según los vecinos.
"En el quebrada hay unas tres ripieras que le han 'comido' mucho terreno al cerro y creo que eso es muy peligroso sobre todo si comienza a llover, ya que el agua podría generar un aluvión el cual bajaría muy rápido y pasaría a llevar las casas", explica el aproblemado vecino quien es dueño de un pequeño minimarket.
Sin embargo, el real drama que don Guillermo y varios pobladores más tienen con las empresas de extracción de áridos es la polución que éstas generan.
"El trabajo de estas ripieras principalmente es en la mañana y en la noche y es de todos los días la polución y 'humaredas' que hay. Tanto así que parece neblina y el polvo deja todo sucio (…) Lo que buscamos es que estas empresas dejen de trabajar porque ya es insoportable la polución", afirma Guillermo.
Héctor Rodríguez, vecino del lugar y presidente del Centro Comunitario Las Últimas Salitreras, corroboró el reclamo de don Guillermo y agregó más antecedentes a la problemática.
"Además de todo el polvo que hay en la noche y en la mañana, a eso hay que sumarle el transporte del ripio, el cual lo hacen en camiones que bajan por avenida Arturo Pérez Canto y en el trayecto hay un jardín infantil y más abajo el Colegio Don Bosco", comenta Héctor para luego añadir que la problemática viene hace más de 10 años, pero desde que se urbanizó el sector, hace poco tiempo, se ha agudizado: "ahora este lugar está sumamente poblado y las casas están muy cerca de las plantas ripieras".
"Yo planté árboles en el sector y los camiones los pasaron a llevar. A mi hijo, que es prematuro, lo afecta bastante el polvo", añadió Pilar Parra, quien, al igual que sus vecinos, está cansada de la extracción de ripio.
Según informó Rodríguez junto a Ana María Silva, otra vecina del sector, este drama ya lo han dado a conocer a las autoridades correspondientes, como la Gobernación Provincial, "y lo único que queremos es que desalojen las empresas cuanto antes".
Ante esta problemática, se le consultó a la gobernadora Fabiola Rivero, quien reconoció estar al tanto de tema hace bastante tiempo y que estaría por finalizar prontamente.
"Apenas recibimos la denuncia, nos constituimos en el lugar con Bienes Nacionales y luego que ellos verificaron que las tres ripieras estaban trabajando en la ilegalidad porque nunca se les entregó la concesión por ser un sector residencial, se presentó la denuncia por el delito de 'hurto de áridos' y el jueves pasado se ordenó el desalojo de las empresas, quienes en ningún momento mostraron oposición, siempre trabajamos muy bien con ellas", expresó Rivero.
La gobernadora agregó que aquella noticia se les comunicó a los vecinos diciéndoles que si estos días veían más movimiento de camiones y trabajos en el lugar era por el proceso de desalojo, el cual terminará prontamente. "Es imposible desarmar empresas de este tipo de un día para otro", finalizó.