Claudia Cáceres Guerrero
"Diagnóstico de Salud de la Población Inmigrante", es el nombre del primer informe de este tipo en Chile, el cual fue elaborado en la Región de Antofagasta por la jefa del Departamento de Salud Pública de la Seremi de Salud, Maritza Fernández, con la colaboración del encargado de Migrante de la Dirección de Salud de la Comdes, Gustavo Macaya; la encargada de Migrante del Servicio de Salud, Luz María Ortiz y del coordinador de Sucursales Zonal Norte de Fonasa, César Espinoza.
Se trata de un instrumento de planificación sanitaria único en el país, preparado a partir de los reportes de las Enfermedades de Notificación Obligatoria (ENO) período 2010-2015, mediante los registros que llevan los consultorios de atención primaria en materia de atención, hospitales y Fonasa.
La seremi de Salud, Lila Vergara, mencionó que "respecto a las ENO, para los chilenos las tres principales son aquellas de transmisión sexual (sífilis, gonorrea y VIH), en tanto la primera para los migrantes es la enfermedad de Chagas. Asimismo, el informe arrojó que del total de prestaciones de salud que se entregan en los servicios públicos, el 10% corresponde a la población migrante, a excepción de una prestación especial que es la atención de partos que llega al 30% (período 2009-2015)".
Vergara dijo que los datos son una buena noticia para la región ya que la tasa de natalidad va a aumentar, "lo que significa un comportamiento demográfico que va a favorecer en esas materias", puntualizó.
Dijo además que del total de patologías que fueron notificadas en el señalado lapso de tiempo, la población extranjera migrante corresponde al 14,1%, concentrándose éstas en personas de entre 20 y 29 años.
La publicación está dividida en 6 segmentos: Datos generales de la región; características de sexo, nacionalidad y educación de la población migrante; Enfermedades de notificación obligatoria; Auditoría de muertes maternas, fetales y neonatales; Incorporación a inmigrantes Fonasa y las atenciones de salud realizadas.
Más datos
De acuerdo al informe de la Seremi de Salud, las muertes maternas del período 2013 - 2015, llegan en total a siete, incluyendo a las mujeres antofagastinas. Tres corresponden a extranjeras de nacionalidad boliviana, colombiana y una sin registro. Sólo una de ellas aparece sin control de embarazo, mientras que el resto de los decesos estuvo asociado a un aborto, a un trastorno hipertensivo y a una muerte obstétrica de causa no precisada.