Antofagastino destaca dentro de los 100 jóvenes líderes
Nicolás Salinas fue reconocido por su trabajo social en diversas entidades y en el desarrollo de la Corporación Gastronómica La Chimba.
Redacción - La Estrella
Con una marcada vocación social, que reconoce tener durante toda su vida, Nicolás Salinas fue reconocido como uno de los "100 Jóvenes Líderes" que están produciendo reales cambios en cualquier área de la sociedad.
En nuestra ciudad, el trabajo de este joven de 32 años se ha desarrollado en instituciones como Techo, CREO Antofagasta, donde es director de Participación Ciudadana, y en el proyecto que hizo realidad junto a su Co-Fundador, Pablo Godoy, y un destacado grupo de profesionales de diferentes áreas.
En CREO Antofagasta tiene a cargo el área de participación ciudadana, que busca articular una red asociativa entre la ciudadanía y organismos técnicos, privados y estatales, para contribuir al proceso progresivo de involucramiento de la comunidad en la planificación urbana y de esta forma, al fortalecimiento de la sociedad civil.
De manera paralela está desarrollando la Corporación Gastronómica La Chimba, una entidad sin fines de lucro que busca aportar al mejoramiento de las condiciones de vida de los habitantes de Antofagasta, mediante el trabajo comunitario en torno a la cocina y las redes colaborativas entre actores vinculados a la gastronomía.
En este contexto de poner en valor los productos locales, nace la feria "Antofa en su Salsa", que busca en la cocina como una excusa de ocupar el espacio público y robustecer la identidad de quienes habitan este territorio, dando forma a un lenguaje común: la comida.
En su carrera, Nicolás ha cumplido roles como conferencista y ha participado en destacadas publicaciones de carácter social como por ejemplo los libros "Las voces de la pobreza" y "El Sabor de Antofagasta".
Trabajo
Para Salinas este reconocimiento pone en valor el trabajo en equipo que ha podido consolidar en una labor con verdadero impacto positivo, ya que en cada una de sus funciones quienes trabajan con él realizan un esfuerzo notable por contribuir con acciones positivas en su entorno.
"Durante mi carrera he sentido que los beneficios del trabajo con vocación social no solo son recibidos por el público objetivo de cada proyecto, sino también por quien lo realiza y por el entorno de los actores involucrados. Logramos emociones positivas en individuos particulares, esta sensación es amplificada a la sociedad entera", manifestó Salinas.