Don Coco, el cocodrilo
Como todos los veranos he vuelto queridos lectores para comenzar el reporteo con las notas veraniegas. Así es, porque cuando la mayoría está en vacaciones, o al menos esperándolas, yo por mi parte salgo en esta época del año a lo que más me gusta: toda la onda de la temporada estival.
Y hace harto rato que quería ir a darme una vuelta a la Playa El Trocadero. He ido antes sí (de hecho, me encontré con unos primos que andaban por ahí en el hombro de algún esforzado vendedor de cocodrilos de hule) pero ahora tiene un toque especial mi visita.
Éste será el primer verano de la nueva playa Trocadero, a la que le aplicaron más que una mano de gato, algo así como una garra de tigre.
Resulta que pese a que está en el sector norte, igual llega gente de otros lados. Y es que la reparación que le hicieron, fue como dejarla con una ondita al Caribe.
Imagine no más, playa, sol, mar, arena y pasto para descansar, con canchas para ir con los amigos y jugar una pichanguita, y para después terminar la tarde con un chapuzón.
Porque eso es lo otro, me di una vuelta por las rocas que rodean la playa y desde ahí noté cómo el agua está con un atractivo color turquesa, así que como soy un cocodrilo, aproveché de nadar un rato y fue lo mejor.
Ojo que El Trocadero ahora tiene baños públicos, ante cualquier emergencia.
"Éste es un lugar muy lindo y precioso, que hacía falta para que uno pueda disfrutar en familia. Quedó muy bonito", fue lo que dijo el vecino Juan Pizarro que recorría el sector del parque.
¡Ah, otra cosa que se me quedaba en el tintero y que es importante! Hay espacios para estacionamientos y no sólo eso, porque también cuenta con acceso universal para ingresar al parque.
Si lo prefiere, durante la mañana no hay tanta gente y es perfecto para disfrutar de la arena haciendo figuras como castillos. Lo malo es que a partir del mediodía el calor no perdona a nadie.
La otra opción es durante la tardecita, aunque como después de las cuatro el calor comienza a bajar su fuerza, llega más gente a disfrutar. De todas formas, la hora no importa. El Trocadero invita a estar todo el día.
$3.300 millones es lo que pusieron de inversión para efectuar la remodelación de este balneario.