Cartas
Bolsas
En tiempos pasados, cuando se compraba en el típico almacén del barrio, los productos como el arroz, el azúcar y los porotos llegaban en sacos, por lo tanto se vendían a granel y se entregaban en papel de envolver. El aceite y la mantequilla venían en tambor y caja. Cada dueña de casa llegaba con su bolsa de género para llevarse los productos.
Ahora se dictó una ordenanza donde los supermercados ya no entregan más bolsas de nylon, por lo tanto cada uno debe llevar la suya. Pero debido a esto, las grandes cadenas de supermercados están haciendo el gran negocio del año, al vender bolsas de papel a 200 pesos cada una.
Deberían entregárselas gratis al consumidor que es el que debiera ser beneficiado. Ganan tanto dinero y siguen aprovechándose del pueblo.
Señores, la bolsa debe ser entregada sin costo. Con esto de terminar con las bolsas, el más perjudicado es el empaquetador que ha bajado mucho su propina.
Para palear esta merma que están viviendo, lo más preciso es que le den un sueldo.