Foto denuncia: Caja sin tapa
La caja de electricidad de este poste, ubicado frente a la municipalidad, está sin su tapa, dejando todo el circuito al descubierto y al alcance de los transeúntes. Ojalá sea repuesta a la brevedad.


La caja de electricidad de este poste, ubicado frente a la municipalidad, está sin su tapa, dejando todo el circuito al descubierto y al alcance de los transeúntes. Ojalá sea repuesta a la brevedad.
En pésimo estado se encuentra la calle a un costado del Terminal Pesquero. Los vehículos deben transitar lentamente por el lugar para no caer en los diversos hoyos que tiene el pavimento.
La juventud es corta y la vejez larga. A cierta edad empieza el cambio en nuestro cuerpo, dolores de pie y manos, cansancio y malestares en el organismo. Es la vejez que está llegando. Así es la vida. Nacemos, somos niños, jóvenes y adultos. El reloj con su tic tac me avisa que un año más se va. Las hojas del calendario caen muy rápidamente, anunciando que un día más se irá. Al mirarme en el espejo veo la realidad y hay que aceptarla. Los años han pasado y ya no se pueden detener. Rememorar los años 60 cuando fuimos jóvenes, llenos de vigor y gozando esa hermosa juventud. Tomar una cerveza en el "Alo alo", pololear en la matinée, tomar el té en la "Chiquita" o almorzar en el "Cuprita". También las pichangas en Las Almejas, los domingos a pinchar a la Plaza Colón y los bailoteos en Los Artesanos. Un chocolate en "Las mil delicias", un lindo vaquero de la Casa Mayol, un juego de billar en el "Andalucía", la diversión en el "Lucerna", una empanada en el "Shop Alemán" y bailando en "La Giralda", lugares que eran donde frecuentábamos. Muchos no supimos aprovechar nuestra adolescencia y cuando quisimos recuperarla ya fue tarde. Plantamos un arbolito y al tiempo vemos con mucha alegría que estos dieron sus frutos.
Señor director:
Meses atrás mandé una nota referente a la necesidad que había que poner un semáforo en la esquina de calle Vicuña con Avenida Rendic, debido al intenso tráfico que hay en ese sector.
Esto fue mucho antes de la apertura del Hospital Regional nuevo. Se me contestó que por haber un semáforo en calle Montegrande (una cuadra antes) no era posible, porque no puede haber semáforos en todas las esquinas.
Le respondí que su respuesta era un chiste, porque en la ciudad hay muchos semáforos instalados en esquinas seguidas. Ahora con la apertura del nuevo hospital hay mucho más tráfico que antes, ya que los vehículos de la locomoción colectiva siguen derecho por Vicuña al poniente para llegar al hospital.
El drama es cruzar las dos vías de Avenida Rendic, ya que nadie les da la pasada y lo que están haciendo es meter la máquina en una de las vías, y esperar a que alguien bondadoso les dé la pasada.
¿Qué están esperando, que haya un accidente gravísimo?
Gracias señor director.
Juan Bennett