Marc Cárdemas - La Estrella
E l país anfitrión de un Mundial de Fútbol siempre aparece dentro de los favoritos para quedarse con la copa. Impensado dejarlos fuera de las apuestas, pero en este caso, Rusia no llega muy bien, carente de figuras internacionales y con más dudas que aciertos en la previa de la cita planetaria que comienza en 31 días.
El seleccionador ruso, Stanislav Cherchesov, a mitad de semana entregó la prenómina de 28 jugadores para el Mundial, quedando fuera Alexander Kokorin, su estrella, que se encuentra lesionado de gravedad y no podrá estar en el torneo. La tarea del goleador deberá ser asumida por Fiodor Smolov que juega en el FC Krasnodar de su país y ha marcado 12 goles en 30 partidos disputados por la selección rusa.
La preparación de Rusia tiene desmotivados a los hinchas locales. En sus dos últimos amistosos perdió 3-1 con Brasil y 3-0 con Francia, ambos encuentros jugados como local, lo que le valió una lluvia de críticas al técnico Cherchesov.
La historia de Rusia en los mundiales no es de la mejores. Su mejor resultado fue en Inglaterra 1966 donde terminó en la cuarta posición. En Brasil 2014 apenas cosechó dos puntos y terminó tercero en su grupo por detrás de Bélgica y Argelia que se clasificaron a los octavos de final.
Abre el mundial
Los rusos inaugurarán el Mundial el próximo 14 de junio cuando se enfrenten a Arabia Saudita en Moscú, un partido que en el papel debería ser accesible para los rusos que están obligados a ganar su primer partido si desean clasificarse, porque después juegan con Egipto, una de las selecciones llamadas a dar la sorpresa y cierran con Uruguay, seleccionado que no debería tener problemas para ganar el grupo.
El jugar como local para Rusia será una presión extra porque tienen la obligación de llegar lo más lejos posible en la copa y hacer desaparecer aquellos fantasmas que dicen que los rusos no tienen nada que hacer en su propio Mundial.