Cartas
Cabo Galindo I
Señor director:
La muerte del cabo primero Oscar Galindo Saravia es un hecho condenable que nos recuerda, lamentablemente una vez más, que quienes sirven en Carabineros de Chile se arriesgan constantemente a situaciones en donde su vida está expuesta a delincuentes, los cuales, no muestran ningún tipo de reparos en asesinar a un representante del Estado.
Al igual que el asesinato de un servidor de Carabineros de Chile en un acto que atenta contra toda la ciudadanía, los valores de la República y la base fundamental de la sociedad que es la familia. Es precisamente la que destruyen al asesinar a un padre, un hermano e hijo que ejemplarmente volcó su vida al servicio público desde el anonimato, pero suprema función de las "carabinas cruzadas".
Mi más sinceras condolencias a Carabineros de Chile, a sus integrantes, que perdieron a un camarada y engrosa tristemente su lista de mártires al servicio de los habitantes de nuestra patria.
Francisco Sánchez
