Contraportada

Redacción

Tres años después de su debut en los cines, volvió esta semana a la pantalla grande, "Ant Man and The Wasp". Se trata de la primera vez que Marvel incluye a una mujer en el título de sus entregas.

El Hombre Hormiga y la Avispa llegan a Chile no sólo con el objetivo de equiparar la recaudación que tuvo la primera película, que superó los US$519 millones, sino que ser el puente entre "Capitán América: Civil War" y "Avengers: Infinity War", además de ser la antesala de "Captain Marvel" en el universo cinematográfico de Marvel.

El director Peyton Reed y el actor Michael Douglas como Hank Pym se repiten en esta versión, además de Michael Peña y T. I. Harris como los amigos de Scott Lang, interpretado por Paul Rudd.

Amor al traje

Tanto en la primera como en la segunda película de "Ant-Man", Evangeline Lilly interpreta a Hope Van Dyne, la hija de Hank Pym. Su madre es Janet Van Dyne, rol que en esta película interpretará Michelle Pfeiffer. Ella recibirá de manos de su padre científico el traje que usaba Janet.

"Lo curioso es que, al principio, cuando quedé seleccionada para 'Ant-Man' y comencé a meterme en este universo, todo me parecía imponente, grandioso y fascinante", manifiesta Lilly.

La intérprete canadiense agrega que su motivación principal para regresar a la saga no sólo fue utilizar el traje de Avispa: "Me emocionaba volver a interpretar a Hope por el increíble arco emocional que el personaje atraviesa en la primera película. Hope había pasado unos 30 años resentida y enfrentada con su padre, y ese rencor que había ido creciendo en su interior le daba esta apariencia tan dura".

La preparación del traje de The Wasp duró cuatro meses y Lilly afirma que la idea es que fuera perfecto y cercano al personaje original: "Siento que debo de algún modo estar a la altura de esas imágenes femeninas absolutamente idealistas de los cómics de superhéroes".

"Cuando el traje de The Wasp finalmente estuvo terminado y me lo puse, fue como que todos en el set sintieron: 'Ahí está'. Y algo cambió en mi ADN, y me sentí una verdadera superheroína. Me pareció excitante pararme delante de la cámara", reflexiona la actriz.

La Estrella