El sonido de "Los Golpes" que todavía se mantiene vigente
Actualmente la banda está formada por los hijos de dos de sus miembros fundadores. El único integrante original que queda con vida, Ricardo Aracena, recordó sus inicios y como creo el sonido característico del conjunto.
Son casi las 5:00 horas en la comuna de La Reina, en Santiago. La madrugada está muy helada y cuatro jóvenes tocopillanos que llevan meses viviendo en la capital, cargan sus instrumentos en el camión de un vecino que va a trabajar a La Vega.
Ellos bajan antes en el centro de la ciudad para dirigirse al sello discográfico EMI Odeón, donde fueron llamados por uno de sus gerentes, Jorge Oñate, la cita es a las 9:00 horas pero ellos llegan con tres horas de anticipación.
A pesar de la puntualidad que demostraron, ya son casi las 15:00 horas y aún nadie los recibe, los sueños e ilusiones con que llegaron parecen diluirse en cada minuto que pasa, sin embargo una puerta se abre y les dicen que pasen.
Adentro, Fernando y Mario Bustamante, guitarra y bajo; Rubén Alegre en batería y voz; y Ricardo Aracena en primera guitarra, comienzan a tocar un tema que tenían preparado. El ejecutivo del sello los mira sin expresión y les pide otra y luego otras más, al quinto tema paran y les dice que los espera el martes para que graben, y: "ahí vemos con les va".
Era el año 1970, han pasado 48 años de esta historia y Ricardo Aracena, uno de sus protagonistas, la recuerda con mucha emoción sentado en el living de su casa en la población Pacífico Norte de Tocopilla.
Grabaron un disco con dos temas, por un lado "Estas Equivocada", y por el otro una cumbia: "Pa´ti pa´mí". Estaban felices, habían conseguido lo que tanto anhelaban, sin embargo ya no tenían dinero para seguir en Santiago y volvieron a Tocopilla con el disco bajo el brazo.
En el Puerto siguieron tocando y recorriendo toda la provincia, hasta que un telegrama desde el mismo sello les dio una gran noticia, su disco se había vendido muy bien y querían que grabaran otro en forma urgente.
Olvidarte Nunca
Los cuatro partieron nuevamente a grabar otro sencillo con dos temas, por un lado uno que ya tocaban en ese tiempo, "Vete Ya", y les faltaba otro para el lado B. Aracena recuerda que el gerente de promoción del sello, Raúl Córdoba, le propuso contarle una historia para que se inspirara e hiciera una canción.
Luego de cinco horas de escuchar la historia, rememoró, escribió y compuso la música de "Olvidarte Nunca", lamentablemente el mayor éxito de Los Golpes fue registrada como propia por otra persona.
Después de eso vino el éxito. Giras dentro y fuera del país y la grabación de dos discos de larga duración, "Olvidarte Nunca" el año 1971 y "Mil Caminos" de 1972, con la formación original, Mario y Fernando Bustamante, Ricardo y Rubén, además de un baterista invitado por el sello, Luis Chaparro, para que Alegre pudiera cantar tranquilo, señaló Aracena.
Lo demás es historia, la separación de la banda original al poco tiempo de lograr el éxito, no impidió que hasta los últimos días de sus vidas los hermanos Bustamante continuarán con la agrupación, la cual ahora es integrada por los hijos y amigos de estos dos tocopillanos.
El Sonido de Los Golpes
Si hay algo que caracteriza la música de Los Golpes es el sonido de la guitarra, sonido que estuvo a cargo de Ricardo Aracena quien el año 2016 recibió un reconocimiento por parte de Sociedad del Derecho de Autor, por sus más de 50 años de trayectoria musical.
Fue por el año 1968 cuando comenzó su búsqueda "de hacer algo distinto que me identificará o al grupo", comentó, para eso con un dinero ahorrado viajó a Arica donde, "encontré una guitarra y unos efectos que ni el dueño sabía para que servían y empecé a probar con eso y me gustó, pensé que podía sacar algo distinto a lo que se usaba en esa época", agregó.
Así con una guitarra eléctrica, un efecto wah wah, un distorsionador y una cámara de eco que modificó el mismo, pensando que si se masificaba otros podrían llegar al sonido, comenzó su búsqueda musical. "De ahí comencé a generar un estilo, el de Los Golpes. Ese sonido fue creado por mí, buscando originalidad que gracias a Dios resultó bien (…) y después tratar de asociar y mezclarlo a lo que ya hacíamos", señaló Aracena.
Profetas en su Tierra.
El miércoles 26 de septiembre del 2018, el Anfiteatro de la plaza Carlos Condell de Tocopilla está repleto de gente, más de quinientas personas llegaron para ver y presenciar el homenaje que la municipalidad local les tiene preparado a los fundadores de la emblemática banda por su trayectoria musical.
A nombre de los hermanos Bustamante y de Rubén Alegre, sus hijos recibieron el reconocimiento, mientras que Ricardo, el único integrante original que va quedando, no pudo estar presente porque nunca le confirmaron bien la fecha y tuvo que viajar -indicó- por lo que su hermano estuvo en su nombre.
"Siempre es grato que alguien te reconozca lo que has hecho, desgraciadamente no pude estar presente, (…) me hubiese gustado estar, tocar con estos muchachos porque para mí hubiese sido una despedida total, porque yo ya no toco en forma comercial, ni en show, sí toco para mí", señaló.
Ocasión que hubiera sido ideal, ya que en medio de la actuación de Los Golpes actuales, se dio la oportunidad que subiera al escenario Marco Alegre, hijo de Rubén, quien tiene un registro de voz muy parecido al de su padre.
Luego de una breve conversación entre los músicos, la guitarra dio sus primeros acordes y como lo hicieron sus padres tantas veces, "Olvidarte Nunca" se escuchó una vez más en la gran noche tocopillana, canción que fue coreada por todo el público.
Nicolás Bustamante, director de la banda actualmente, e hijo de Fernando, señaló que "los viejos allá arriba deben estar muy contentos" y añadió que "fue algo increíble y emocionante, pero todo en homenaje a nuestros padres. Era el sueño que tenían ellos de volver con harta gente".
Por su parte, Marco indicó sentirse "muy feliz y emocionado" porque es un "legado que dejaron nuestros padres (…) fue una experiencia muy bonita que me dejó muchos recuerdos, prácticamente volví cuando era un niño".
Luego el show continúo con "La Mano en la Biblia", una versión de "Mi Viejo de Piero", y el clásico y segundo himno de la ciudad, "Tocopilla Triste", que fue cantada por todos los asistentes que estaban felices de ver, por fin, otra vez a Los Golpes cantar en la ciudad.