Si bien en un principio en la población Los Arenales 3 no había problemas de delincuencia, de un tiempo a esta parte los vecinos comenzaron a tener problemas con robos en las casas. Esto los llevó a que -sin conocerse- pudiesen poco a poco relacionarse entre sí, y ahora estar totalmente coordinados para prevenir este tipo de delitos.

Ese fue un trabajo que hace meses vienen ejerciendo los pobladores, luego de que pidieran la asesoría de la Fundación Antofa Segura, del cual finalizaron las actividades de este año hace algunos días, con la entrega de alarmas comunitarias para cuidarse entre los residentes de la población.

Johana Araya es una de las vecinas que vive en el sector y quien hoy tras haberse organizado junto a otros pobladores, es delegada del pasaje Luis Hernández Parker, por parte de la fundación.

Ella comenta que "todo empezó porque comenzaron a haber muchos robos acá en la población y entonces a mi vecina se [le] metieron a su casa a sacar las cosas desde adentro... Ahí ubicamos a la fundación y nos comentaron del tema de las alarmas comunitarias y otras cosas".

Lo primero fue conocerse entre pobladores. "Nos juntamos como vecinas del mismo pasaje, tuvimos una reunión y nos presentaron el tema, después conocimos a otras delegadas de otras cuadras en la misma población. En las reuniones empezamos a trabajar para unirnos y ver cómo podíamos combatir la delincuencia".

Johana añade que antes de eso como pobladores no se conocían y, además, dice que era común el pensamiento de la comunidad de que Los Arenales 3 por estar en el sector norte alto de la ciudad, sería un sector peligroso por la presencia de delincuentes.

Sin embargo señala que "siempre estigmatizan a los sectores y entonces acá nosotros no queríamos que se nos estigmatizara a todos como delincuentes porque aquí hay mucha gente que es de trabajo. Los que venían a robar acá no eran del sector, sino que desde otros lugares".

Una vez que se conocieron todos, posteriormente los pobladores efectuaron otras actividades como la tradicional "Yo Cuido la Casa de mi Vecino", en la que a través de pegatinas en varias casas, se envía el mensaje de organización contra la delincuencia.

Trabajo

Finalmente se realizó la entrega de 11 alarmas comunitarias, las que tienen el objetivo de alertar a los pobladores en el caso de una situación de emergencia y en la cual trabajan como equipo para abordar la situación o prevenir algún delito.

"Esto realmente ha servido porque ahora cuando se ve gente extraña o han querido robar, la gente que tiene las alarmas las hacen sonar y los delincuentes salen arrancando. Un día una vecina tenía todo en el antejardín como para llegar y sacarle las cosas y gracias a las alarmas no pudieron hacer nada porque sonaron y los tipos arrancaron", manifiesta.

Mientras que el presidente de Antofa Segura, Fabián Ossandón, agrega que "comenzamos hace siete meses con la primera asamblea informativa, en el que el trabajo consistió en ganarnos las confianzas para generar un equipo de delegados de calle, los que fue en su cien por ciento de vecinas que representaron a sus cuadras. Después comenzamos con la unión y organización vecinal, generando instancias para recuperar lazos y se pone el objetivo común de la tranquilidad y seguridad".

"Después de las instancias (anteriormente mencionadas) este grupo de vecinas logró la instalación de las alarmas, financiadas con sus propios recursos. En siete meses se logró hacer lo que en años no se ha hecho en distintas poblaciones, pero más allá de eso la idea es recuperar a un grupo de vecinos que se hiciese cargo de un problema que nos afecta a todos y generar el vínculo con un objetivo común, con una acción concreta".