Un emocionante viaje por los parajes del Desierto de Atacama fue la experiencia que tuvo un grupo de 30 estudiantes del Liceo Andrés Sabella Gálvez, que se ganaron el derecho a participar en esta verdadera travesía, luego de obtener el primer lugar del torneo "Inter Escolar: conocimientos y desafíos" organizado a mediados de agosto por el municipio a través del programa Antofagasta Joven.

En tres días intensos, los jóvenes conocieron las lagunas Miscanti y Miñiques, ubicadas en el altiplano chileno a más de 4.100 metros sobre el nivel del mar, además de los poblados de Socaire y Toconao, empapándose de la cultura Lickan Antai; recorrieron las cavernas y dunales en el Valle de la Luna, y desde ese místico lugar contemplaron un inigualable crepúsculo que los sorprendió.

Esta iniciativa entrega conocimientos y experiencias a los jóvenes estudiantes, en el ámbito del patrimonio, fauna y flora endémica, así como también, es la instancia para recorrer sitios de interés turístico de la región.

Al respecto, el coordinador de Antofagasta Joven, Eduardo Videla destacó esta iniciativa enfocada en establecimientos de educación municipal "el balance es positivo, porque logramos que jóvenes de la ciudad conocieran sitios que para ellos eran desconocidos, solo lo habían visto por fotografías y el hecho de recorrerlos, conocer su importancia ambiental y patrimonial ya es importante para ellos, se van con una experiencia nueva para sus vidas".

Ricardo Muñoz - La Estrella

La educación es tal vez el tesoro más preciado que los padres le podrían dejar a sus hijos y una de las figuras más importantes en ese contexto es el de las y los educadores de párvulos, profesionales que desde los tempranos años de los niños, se encargan de que ellos obtengan sus primeros contenidos pedagógicos.

Y fue el jueves que a nivel nacional se celebró el Día de la Educación Parvularia, fecha en la que la Corporación Municipal de Desarrollo Social no pudo estar ausente, para así reconocer la labor que realizan 45 educadoras y 45 técnicos, que se destacan en los establecimientos municipalizados de Antofagasta.

Son cuatro mil 317 niños y niñas los que en la capital regional cursan transición menor y mayor en cuatro escuelas de párvulos, 28 escuelas básicas y cinco liceos, pertenecientes a la CMDS, contabilizando 73 asistentes y 101 educadoras.

A esta cifra se suman 728 pequeños que asisten desde salas cuna a transición mayor en 10 jardines infantiles que funcionan mediante transferencia de fondos, en los que laboran 134 educadoras, asistentes y auxiliares de servicio, cuyo trabajo pedagógico contribuye directamente al desarrollo cognitivo, afectivo y motor de cerca de cinco mil párvulos de Antofagasta.

Ayer se realizó la ceremonia de reconocimiento en el Teatro Municipal, la que fue encabezada por la alcaldesa Karen Rojo. quien manifestó que "agradezco, valoro y me enorgullezco de la labor que cada una de las educadoras y técnicos en educación parvularia realizan en nuestras unidades educativas, porque el maravilloso trabajo que realizan comienza desde los primeros meses de vida de nuestros pequeños hasta que llegan a alcanzar las habilidades necesarias para ingresar a la educación básica donde la lectura les abre un mundo maravilloso al conocimiento; su entrega y compromiso es sin duda clave para que el proceso formativo futuro sea exitoso".

Entre las educadoras distinguidas se encuentra la profesional, Franchesca Matamoros, de la Escuela "Arturo Prat Chacón" E-80, quien fue la única "tía" de la comuna en obtener la categoría "Destacada" en la Evaluación Docente 2017.

La profesional dijo estar "feliz de recibir este estímulo que me motiva a seguir trabajando en favor de la educación pública y de nuestros niños y niñas más vulnerables", precisó.

La educación inicial entrega una serie de beneficios a los niños y niñas, quienes mediante la metodología de aprendizaje a través del juego, adquieren habilidades fundamentales para la vida, además de recibir las herramientas necesarias para que los párvulos inicien el proceso de lecto-escritura el que da inicio formal en primer año básico.

4.317 Niños y niñas de la capital regional cursan transición menor y mayor.