Fabiola Vega Molina

El mal olor que sienten los estudiantes de la Escuela Elmo Fúnez, del Liceo Politécnico Los Arenales y los vecinos de la Población Los Arenales ya se ha convertido en una molesta costumbre de todos los días.

Es justo en la esquina de las calles Río Maule con Julio Montt Salamanca donde se acumulan desechos, lo que genera en el lugar un microbasural que atrae moscas y ratones. Además de eso, hay agua estancada lo que genera mal olor.

"En la escuela Elmo Fúnez convivimos a diario con esto, con el mal olor, basura. (...) Los más perjudicados son los niños y tías del jardín infantil. Tenemos trampas ahí y todos los días sacamos ratones que por cierto no son chicos", dijo Elizabeth Osorio, directora de la escuela.

Para dar a conocer esto, hace un mes que comenzaron a trabajar en conjunto con la junta de vecinos de la población Los Arenales los dos establecimientos, pobladores del macrocampamento Los Arenales quienes hicieron una carta donde relatan los problemas que estos les ha generado en su diario vivir y que necesitan la intervención de las instituciones para lograr una solución.

"A diario aparece un acopio de bolsas de basuras y desperdicios que es recogido a diario por un camión y un cargador frontal. (...) La poza de aguas servidas permanece intacta expeliendo una serie de malos olores y bichos que dificulta poder abrir las ventanas de las salas de clases de la escuela Elmo Fúnez", indica la carta.

Al llegar al lugar, lo primero que uno nota es el mal olor. "En este lugar vivimos familias y al colegio asisten muchos niños, entonces hay que actuar de inmediato", dijo la vecina Luz Fuentes, que vive cerca del sector.

En tanto José Poblete, otro vecino del lugar, indicó que el camión de la basura para por el lugar y recoge todos los desechos. "El camión se lleva la basura, pero después llegan personas que vienen de otros lados a tirar más basura, sobre todo los que están en los campamentos arriba que no son todos, no podemos culparlos a todos ellos. (...) Es un círculo vicioso que nunca termina", expresó.

La directora de la escuela también indicó que personas del macrocampamento dejan la basura en el lugar y terminar con esta "emergencia sanitaria".

Solución

Ante esta grave problemática, el jefe de Servicios Generales de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS), Francisco Pizarro, explicó que aunque reciben toda la colaboración en forma permanente del municipio con el retiro de desechos domiciliarios y elementos voluminosos del sector, solicitarán la colaboración de otros organismos para trabajar en conjunto en la búsqueda de una solución medio ambiental para el lugar.

"El miércoles 29 de mayo vamos a exponer esta situación al Consejo Comunal de Seguridad a fin de aunar criterios que permitan mejorar el manejo de residuos domiciliarios", dijo

Por su parte, el gobernador (s) de Antofagasta, Edgar Blanco, explicó que como Gobernación se ha realizado un trabajo de años con las familias de campamentos, pero principalmente en las labores que competen al Ministerio del Interior que son las relacionadas a la protección civil, las emergencias y la seguridad de las personas y pública.

"Sin embargo, esta es una situación (microbasurales) que nos mantiene preocupados y ocupados, y vamos a recibir la solicitud de la CMDS, la cual trabajaremos con el organismo técnico gubernamental correspondiente, para que juntos generemos alguna solución o disminución de los riesgos, ante una eventual emergencia sanitaria", manifestó.

fabiola.vega@estrellanorte.cl

Una moderna sala de lactancia se inauguró en el jardín infantil Caballito de Mar de la Corporación Municipal de Desarrollo Social y que beneficiará a los más de 50 apoderados ya que les permitirá dar continuidad a este sistema de alimentación el que debe entregarse al bebé de forma exclusiva hasta los seis meses.

Esto, porque el establecimiento asisten niños y niños desde que tienen 82 días hasta los tres años y 11 meses, por lo que muchos de ellos aún están amamantando.

La inversión de la sala materna fue de $10 millones y cuenta con un sillón, lavamos, un infantómetro para medir la talla de los bebés, una balanza pediátrica, entre otras cosas

"Estoy muy feliz porque esta sala es muy beneficiosa para las mamás que trabajamos y para mí es muy importante tomarme mi hora de lactancia porque quiero seguir dando pecho para fortalecer el apego en especial ahora que se me terminó mi postnatal y para poder verlos durante el día", afirmó Jacqueline Cortés, una de las beneficiadas.

Por su parte, la directora del jardín, Sandra Pérez, dijo que "el espacio es muy acogedor y para nosotros tiene una doble funcionalidad porque además es una sala de enfermería por lo que es un lugar dedicado a nuestras mamitas. Para nosotros es fundamental que ellas sigan amamantando a sus hijos por todos los beneficios que tiene este sistema de alimentación".