Cartas
Gracias a la radio
Señor director:
Al cumplirse los 50 años de la llegada del hombre a la luna, corresponde hacer un reconocimiento a la radio. Sí, porque la poca masividad de los televisores en Chile para esa fecha, hizo que millones de chilenos siguieran el viaje de la Apolo XI y la caminata de Neil Armstrong en nuestro satélite natural a través de este medio de comunicación. Y la radio fue la voz de América, escuchada por la onda corta o por las radios chilenas.
Su misión fue el transmitir directamente desde Houston. De más está decir que al escuchar en directo los audios de los propios astronautas durante toda la travesía y caminata lunar, junto a las características voces de los locutores hispanoparlantes con los típicos sonidos de las transmisiones radiales de aquella época, con la incertidumbre cuando se perdía la comunicación, más conocida "como cuando se iba la onda", sin duda alimentaban la poderosa imaginación de todos los radioescuchas. Pero esa noche, la del 20 de julio de 1969, fue ampliamente superada por la maravillosa realidad, ni más ni menos que con la llegada del hombre a la luna, y fue tanto el impacto que al otro día ya se pensaba en viajar al planeta Marte. Gracias a la radio, porque con sus palabras permitió que todos los radioescuchas de Chile y el mundo, a falta de imágenes por televisión, echaran a volar la imaginación.
Luis Enrique Soler Milla