Condenado por abuso y violación en contra de su hijita
Hechos ocurrieron el año pasado en Calama, cuando la víctima tenía tan sólo 12 años.
Redacción - La Estrella de Antofagasta
Ocho años suman las penas impuestas a un poblador, a quien el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Calama encontró culpable de un delito de abuso sexual y otro de violación, ambos en perjuicio de su hija de 12 años al momento de perpetrados los hechos.
El sentenciado, I.A.M.A., de 42 años, recibió una pena de 3 años y un día de presidio menor en su grado máximo por el primer ilícito y otra de 5 años y un día de presidio mayor en su grado mínimo por el segundo.
Las condenas, informó el Ministerio Público, deberá cumplirlas de manera efectiva, ya que no reúne los requisitos para penas sustitutivas.
La acusación del fiscal Claudio Sobarzo Tassara estableció que desde abril del año pasado y cuando la víctima vivía con su padre en un inmueble de Calama, éste le realizó tocaciones en sus órganos genitales para luego comenzar a accederla carnalmente, lo que ocurrió en varias oportunidades mientras I.A.M.A. "dormía junto a la menor en la misma cama. Los abusos se prolongaron hasta el mes de julio del mismo año, cuando la menor develó en su colegió lo que estaba ocurriendo en su domicilio, generándose la denuncia respectiva".
La niña relató que debido a abusos que su hermano cometió en su contra ha debido pasar por hogares de menores. Luego de eso "su padre se hizo cargo de ella y aunque en un principio la trataba bien, luego empezó a golpearla, y ante la llegada de un familiar a la pieza que ambos compartían debió empezar a dormir con su padre en la misma cama, al tener que ceder la suya al recién llegado, oportunidad donde comenzaron las agresiones sexuales".
La víctima indicó que cuando ocurrieron los episodios de abuso con su hermano, su padre le prometió que nunca más volvería a ocurrir algo así, ya que él siempre la protegería y luego de eso el empezó a hacer lo mismo. Dijo sentir confusión por ello y que por las noches lloraba, ya que no veía salida a la situación. Sin embargo, un día le contó lo que ocurría a su mejor amiga y la mamá de ésta le aconsejó contarle lo que sucedía a la sicóloga de la escuela.
12 años tenía la menor al momento de perpetrados los hechos cometidos por su padre biológico.
2 delitos, uno de abuso sexual y otro de violación, perpetró el poblador según dio por acreditado el tribunal.