Grupos salen a parar a los saqueadores: hasta la concejala Navarro los atajó
"Soy del pueblo, pero no tolero ese tipo de vandalismo", dijo la edil que quitó cosas y las rompió para que nadie se las robara desde el Unimarc.
Un hombre salía a toda velocidad de la turba que asaltó el Unimarc Pampino, frente al Mercado, el miércoles. El tipo se alcanzó a llevar cuatro Coca Colas de litro y corrió por Ossa al sur. No alcanzó a llegar a Uribe cuando lo atajaron decenas de manifestantes a quitarle las cosas robadas. La concejala Doris Navarro, con su polera blanca de la municipalidad, lo correteó con un cono naranjo de esos que ponen para el tránsito. El resultado: el hombre arrancando sin nada, las coca colas derramadas en el piso y la gente de la marcha esperando más saqueadores.
"Todo Chile está marchando con las manos limpias, entonces esto lo ensucia", dijo la concejala ayer, al día siguiente de su participación en esta suerte de "escuadrón anti saqueos" que esperaba a los ladrones. Ninguno de ellos se quedaba con lo robado, porque el copete se derramaba y lo sólido se iba a la hoguera.
Pero una cuadra más allá, en Maipú, el saqueo se repartía. Limones y cervezas se regalaron a quien quisiera. Llovieron bolos de carne. Uno más vivo se llevó dos sacos de Pedigree de diez kilos y cuando uno lo encaró porque era mucho y debía repartirlo para todos, él dijo que no porque tenía muchos perros. Durante largos minutos los carabineros ni se vieron. Después aparecieron por Ossa, a toda velocidad, lanzando agua con el "guanaco" y gases lacrimógenos.
La concejala Navarro dice que lo de los saqueos no son actitudes de la gente que está marchando y que ellos no lo avalan porque no es la intención del pueblo. "Apañaron los cabros para que no se llevaran las cosas porque no correspondía. En lo personal soy del pueblo, pero no tolero ese tipo de vandalismo de quien sea", cuenta, mencionando que si roban "por último háganlo sin andar encapuchado. Ahí se ven los choritos".
Con respecto a las movilizaciones, Doris Navarro opina que las demandas son muy válidas y no escuchadas, y que la presencia de militares en la calle "pone a las personas más agresivas, es como mandar al choque, porque nos vemos como enemigos y no es la idea", señalando que ha defendido a personas inocentes que -dice- han sido reprimidas por la fuerza policial. "Esas cosas a mi no me gustan", dice.
18:00 horas del miércoles se produjeron los incidentes en Ossa, que terminaron con la presencia de Carabineros y militares.