Concejales: show funcionó por la TV, pero ciudad sufrió las consecuencias
Ediles hicieron una crítica evaluación del certamen y los problemas de seguridad en el centro.
Francisca Avsolomovich
Ya finalizó la 61° versión del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, el cual marcó un hito en el contexto nacional actual.
Desde el inicio del estallido social hubo conflictos sobre si debía realizar, teniendo en cuenta, además, los llamados por redes sociales a boicotear el evento que duró seis días.
Todo empezó el domingo 23, la primera jornada festivalera, cuando no solo quemaron automóviles, además saquearon locales y atacaron a piedrazos el Hotel O'Higgnis, el cual finalizará sus servicios indefinidamente. Tomando en cuenta este escenario, los concejales de la ciudad realizaron un balance de lo que fue el lado b del Festival.
Hotel O'higgins
En relación a lo que sucedió en el hotel O'Higgins, los concejales Carlos Williams (RN), Sandro Puebla (Independiente-PS), las concejalas Laura Gianicci (DC) y Marcela Varas (PPD) están de acuerdo en que nada justifica dicho acto de violencia y que las consecuencias que trae el cierre del histórico recinto afectan a cientos de familias viñamarinas y a la ciudad entera.
"Viña del Mar no se puede dar el lujo de tener el hotel O'Higgins sin operación, no solo por la oferta hotelera que contribuye al turismo de la ciudad, sino porque hay un número de personas que trabaja por años en el hotel, que hoy sufre junto a sus familias", expresó Marcela Varas.
Por su parte, el concejal Carlos Williams señaló que, "estos actos delictuales para nada ayudan a los propósitos manifestados por los chilenos en sus demandas sociales. Acá se ha visto perjudicada la gente de trabajo".
Asimismo, la concejala Laura Gianicci, quien condena tanto la violencia ciudadana como de Estado, declaró que, "fue impesentable que no hubiera Carabineros cuando sucedió lo del O'Higgins. Se salió todo de las manos y dejaron las calles libres para que hicieran lo que quisieran".
La ciudad
En cuanto a si fue correcto o no realizar el Festival dadas las condiciones, la concejala demócrata cristiana expresó que "se privilegió el Festival antes que la ciudad".
En lo que coincide Marcela Varas, quien afirmó que "se abandonó a la ciudad por querer mostrar un show televisivo, las autoridades se olvidaron de los vecinos y de los comerciantes".
Además declaró que "los que hicieron los destrozos nada tienen que ver con el grupo de manifestantes que también llegó al sector de la plaza Sucre para ser escuchados y decirle a Chile que Viña del Mar es más que la ciudad con palmeras y show que se vende en la televisión, que es una ciudad que ha tenido una autoridad ausente".
Por otra parte, el concejal independiente, Sandro Puebla, expresó que si bien el Festival cumplió en cuanto a estándares de espectáculo, "le ha fallado a la ciudad ya que su desarrollo y cuidado no ha permitido que las autoridades le den la debida protección a los vecinos de Viña del Mar que transitan por las cercanías de la Quinta Vergara".
El show
El concejal Williams admitió que él no asiste al Festival, "es más, ni siquiera lo veo por TV".
No obstante, los demás concejales concuerdan en que, en cuanto al Festival como show televisivo, el certamen sí cumplió.
La concejala Gianicci señaló que "la mayoría de los artistas que vinieron apoyan el movimiento, entonces encuentro contradictorio lo que sucedió, pero igual todo lo que pasó en la calle no tiene que ver con el movimiento social, ni los anarcos hacen esto".