Redacción - La Estrella

La subsecretaría de Salud Pública envió un documento a todas las seremis de Salud del país para orientarlos sobre cómo se deben manejar los residuos de la atención domiciliaria de enfermos con covid-19.

El texto, firmado por la subsecretaria Paula Daza, establece que los residuos de las viviendas donde hay personas confinadas con la enfermedad deben ser desechados con doble bolsa. Para ello, se debe poner un tacho o receptáculo con tapa ubicado en un lugar que esté dentro de la zona donde pernocta la persona enferma aislada.

El cuidado también se debe tener en el material desechable que use la persona y sus cuidadores, como, por ejemplo, los guantes. Todo lo que pudiese estar contaminado, tiene que estar en ese tacho de basura (ojalá con pedal de abertura), que debe incluir una bolsa plástica en su interior. El receptáculo, por cierto, tiene que estar cerrado, y sus residuos no pueden ser reciclados.

El aseo también es importante dentro de la pieza donde esté el enfermo. No pueden haber residuos, ni mascarillas, ni pañuelos usados tirados en el suelo, ya que para eso está el receptáculo de basura.

Cuando ya esté lleno este tacho, la bolsa plástica se debe anudar o sellar antes de sacarla de la pieza, y el procedimiento se hace usando guantes y mascarillas. Esa bolsa se debe meter en una segunda bolsa, y en esa meter los guantes y mascarilla que se usaron para hacer la pega.

Cómo se sacan los guantes

Lo que informa el protocolo para sacarse los guantes es bien específico, así que hay que ponerle ojo: para retirar el primer guante, se toma el borde por la cara externa, se da vuelta completamente y se bota después a la basura.

El segundo guante se bota metiendo los dedos de la mano sin guante por la cara interna del otro, hacia la palma de la mano. Se da vuelta el guante y se bota en la basura.

Después hay que sacarse la mascarilla. Eso se realiza tocando solamente los elásticos y se bota en la bolsa, para después cerrarla. Esta doble bolsa se echa en el lugar donde usted normalmente usa para el resto de la basura, antes que se la lleve el camión.

Al final, el cuidador debe lavarse las manos. En el caso de los edificios, la doble bolsa no se manda por el ducto, sino que hay que ir a dejarla directamente a la sala de basuras para ser depositada en los contenedores del edificio.

El general José Miguel Aguirre lo anunció desde principios de semana: se reforzarán los controles para evitar el tránsito de las personas que se les ocurra salir durante este finde largo de Semana Santa. Y ayer ya fueron anunciados los puntos que evitarán que la gente viaje cuando lo que menos se requiere en estos momentos, son los paseos aquí y allá.

En María Elena, está la aduana en Quillagua, en la ruta 5 (acceso norte, que limita con la región de Tarapacá). En Tocopilla, está la aduana sanitaria (en el acceso norte a la ciudad) y el control preventivo, ubicado en el acceso sur.

Para entrar a Calama, también hay un control preventivo en la ruta 24 (salida norte por Chuquicamata, lo que evitará el tránsito hacia María Elena o Tocopilla), en el acceso a Chiu Chiu y el control de la Dupont. En tanto, en Antofagasta habrá un control en el acceso norte de la ciudad, por la ruta 1, también otro en La Negra.

El tránsito entre comunas solamente se va a permitir a quienes van a sus domicilios, lo que deben documentar (si no, los devuelven). Habrá controles en rutas a destinos turísticos, balnearios y espacios públicos.

En Taltal hay control sanitario preventivo en la Ruta 5 y un control en Paposo. Sierra Gorda tiene control sanitario preventivo en Baquedano; mientras que habrá también control en la ruta 23CH, acceso a San Pedro de Atacama.

En tanto, seguimos con ocho aduanas sanitarias en la región: Ollagüe, Jama, el aeropuerto Andrés Sabella, Paso Sico, aeropuerto El Loa, y en los puertos de Antofagasta, Tocopilla y Mejillones.