Calle 14 de Febrero tiene semáforos otra vez
Dirección de Tránsito del municipio antofagastino activó reguladores en la intersección de esa vía con Uribe y también con Maipú.
Redacción - La Estrella de Antofagasta
Ante el término de las vacaciones de verano, la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Antofagasta activó los semáforos instalados en las intersecciones de calle 14 de febrero con Uribe y Maipú.
Las acciones de dicha unidad estuvieron enfocadas en el fortalecimiento de medidas de protección vial, reforzando el demarcado de pasos de cebras y la recuperación de señaléticas en mal estado.
Según el municipio, sólo en lo que va corrido del año en Calle 14 de Febrero se han registrado tres accidentes de tránsito, por lo que el Departamento de Estudios e Ingeniería de Tránsito decidió instalar un signo Pare.
Además, en forma paralela, se hizo la reposición de los reguladores de tránsito, con una inversión que llegó a los 15 millones de pesos, financiados con recursos 100% municipales.
"Estamos en calle 14 de febrero instalando 8 semáforos, los que nos facilitan y aseguran contar con los resguardos que corresponden para evitar accidentes. Hemos salido a solucionar los problemas a la calle en materia vial, desarrollando, además, el demarcado peatonal, así que vamos a continuar con este trabajo que consideramos necesario", indicó el alcalde Wilson Díaz, enfatizando que la Dirección de Tránsito está poniendo en operaciones semáforos en lugares donde dejaron de funcionar.
Semáforos móviles
El municipio destacó otras medidas preventivas de seguridad vial, para lo cual con el fin de dar solución inmediata adquirió unos semáforos móviles, "que son puestos en intersecciones de alto riesgo en horarios peak, medidas que entregan soluciones inmediatas mientras se materializa el anhelado proyecto que permitirá recuperar nuestra ciudad, desde el punto de vista de seguridad vial".
Además, informó que durante el año pasado y de manera preventiva, fueron instalados 86 nuevos reductores de velocidad o lomos de toro en avenidas y cruces, lo que significó un costo de 115 millones de pesos, también financiados con fondos municipales.