Pocos, pero buenos
Estimado director:
Si hoy los partidos políticos tienen grandes problemas para encontrar personas que acepten ser candidatos a senador en las próximas elecciones de noviembre, ¿se imagina usted los "problemazos" más grandes que tendrían para buscar candidatos, si hoy en Chile se aumentaran drásticamente los paupérrimos requisitos que hoy se exigen para ser candidato a senador, diputado, alcalde, core, gobernador, que palabras más, palabras menos, son ser chilena (o), tener cuarto medio y respirar, se imagina usted?
El Poder Ejecutivo y Legislativo deberían elevar drásticamente los requisitos para ser candidato en Chile, de seguro puesta en práctica esta crucial medida, complicará aún más la búsqueda de candidatos en Chile, pero los pocos que encuentren, serán los que se merecen las chilenas y los chilenos, no más promotores del "día de la brisca", ni sacadores de vuelta, ni payasos, apuntalados por batallones de asesores que son pagados por la señora Juanita y el tío Rorro.
"Más vale pocos y muy eficientes, que muchos... dando la hora".
Luis Enrique Soler Milla
Respetar las normas
Señor director:
La transformación de un gobierno democrático a uno autoritario no ocurre abruptamente, sino que es el resultado de una serie de acciones que se adoptan en diversas áreas y en ocasiones de manera reservada o imperceptible para la gente. Uno de los principales anticuerpos que las repúblicas pueden elaborar, consiste en delimitar claramente las atribuciones de las distintas autoridades, con controles ciudadanos al igual que de otras instituciones. Todos los mecanismos de limitación del poder permiten potenciar formas de participación ciudadana y resguardar el Estado de Derecho, aún si los representantes no están de acuerdo con las reglas del juego. Claro ejemplo de este punto, son algunos convencionales constituyentes que reniegan de sus obligaciones y restricciones. Estos olvidan que su única función, la redacción de una propuesta constitucional que será aprobada o rechazada en un plebiscito por la ciudadanía, posee reglas claras, pero que no limitan el diálogo entre los miembros de la Convención. El profesor Sebastián Soto dice que "no hay que sobredimensionar si juran o no los constituyentes porque de todos modos ellos seguirán obligados a respetar las normas vigentes".
Martín Durán F.
